Es árbol de mucho adorno en las avenidas y su madera de gran uso en la escultura y carpintería

El Tilo es un árbol perteneciente a la familia de las Tiliáceas, de tronco alto y grueso, de corteza lisa y algo cenicienta, y madera blanca y blanda; las hojas son de figura de corazón, puntiagudas y cerradas por los bordes; las flores de cinco pétalos son blanquecinas, olorosas, muy abundantes y medicinales; el fruto es redondo y velloso, del tamaño de un guisante.

Es árbol de mucho adorno en las avenidas, paseos, parques, plazas, y su madera de gran uso en la escultura y carpintería. En francés de llama “tilleul”.

De todas las variedades que existen, la que más se usa con fines medicinales es la Tilia europea y es común encontrarla en las farmacias.

• El tilo se emplea como sudorífico, diurético y expectorante en los casos de fiebres, sarampión, gripe, resfríos, tos y bronquitis. También se emplea en las enfermedades nerviosas. Para curar estas dolencias se prepara en infusión una cucharadita (de las de café) de hojas y flores de tilo por taza y se toma de 1 a 4 tazas al día con o sin azúcar. Como sudorífico se toma bien caliente y mezclado con el jugo de un limón. Esta infusión también es un poderoso sedante de los nervios y contribuye a calmar los dolores de cabeza y los vómitos.
• Para calmar los dolores en los pies, se preparan las hojas de tilo en infusión y se bañan los pies, alivia rápidamente el cansancio.
• Para curar las gripes, catarros, tos y sinusitis se vierte una taza de agua hirviendo sobre dos cucharaditas de flores de tilo, una cucharadita de flores de manzanilla y una cucharadita de hojas de hierba buena, se deja hervir un minuto y reposar tapado por 15 minutos. Se cuela y se endulza con miel de abejas y se toma cada tres o cuatro horas.

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