Mandataria de Costa Rica planeaba solucionarlo ayer en cumbre del SICA pero Ortega no asistió
El vicepresidente nicaragüense, Jaime Morales Carazo, se mostró optimista al asegurar que la nueva discrepancia que enfrenta Nicaragua y Costa Rica por el limítrofe río San Juan será superada.
"Se trata de un equívoco, que estamos seguros que no afectará las buenas relaciones entre ambos países, interesados en fortalecer e incrementar buenas relaciones y desarrollar la zona", dijo Morales en declaraciones al Canal 12 de televisión.
El discrepo entre ambas naciones se debe a que Nicaragua tiene planeado dragar el Río San Juan, pero Costa Rica asegura que dicha proyecto debe de constar con su autorización.
Ante esa intención el Gobierno nicaragüense manifestó que el vecino país está inmerso en una equivocación, debido a que Nicaragua tiene soberanía sobre el río, según el fallo de la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
Pero Costa Rica afirmó que exigió a Nicaragua "detener inmediatamente" los planes para dragar el río San Juan, bajo el argumento de que tal obra podría afectar los recursos naturales costarricenses.
Ausencia de Ortega en Cumbre impide arreglar problema
Por otro lado, el lunes la mandataria de Costa Rica Laura Chincilla, manifestó su intención de solucionar las diferencias en cuanto al río, durante la cumbre extraordinaria de jefes de Estado del Sistema de Integración Centroamericano (SICA), acto al cual la gobernante asumió que el presidente nicaragüense Daniel Ortega, asistiría.
Según publicó hoy el diario la Nación de Costa Rica “la ausencia del presidente de Nicaragua a la cumbre frustró el plan de Chinchilla de aclarar las dudas ticas sobre el dragado del río San Juan, en la frontera norte”.