Hasta hoy se conocerá a su contrincante para la final que puede ser España o Alemania
CIUDAD DEL CABO.- Holanda venció 3-2 a Uruguay y se aseguró un boleto, el primero en 32 años, a la final de una Copa del Mundo, que en Sudáfrica consagrará al primer campeón mundial europeo fuera del Viejo Continente.
Giovanni van Bronckhorst a los 18', Wesley Sneijder a los 70' y Arjen Robben a los 73' convirtieron los goles de Holanda, que jugará la tercera final mundialista de su historia (Alemania 74 y Argentina 78, ambas perdidas ante los anfitriones).
Sneijder, a quien la FIFA le otorgó los dos goles en el triunfo ante Brasil por 2-1 (el primero había rozado en Felipe Melo), es uno de los artilleros de este Mundial junto al español David Villa, ambos con cinco conquistas.
Diego Forlán a los 41' y Maxi Pereira a los 91' marcaron para Uruguay, último representante sudamericano en Sudáfrica, que buscaba un lugar en la final por primera vez en 60 años y que deberá jugar el sábado en Port Elizabeth por el tercer puesto.
Será ante el perdedor del duelo que animarán mañana España y Alemania en Durban, cuyo vencedor en cambio chocará el domingo en el estadio Soccer City de Johannesburgo frente a Holanda por el título.
En un partido dinámico y que tuvo un inicio parejo, Holanda fue superior al controlar más la pelota y ser más incisivo en ataque, ante un Uruguay bien parado especialmente en defensa, a pesar de la ausencia por lesión del capitán Diego Lugano.
Sin embargo, Holanda intentó aprovechar la fragilidad "Celeste" por el lado del zaguero de Juventus de Italia, Martín Cáceres, por intermedio de Robben.
La "Naranja" tuvo sus principales oportunidades con un tiro desviado de Dirk Kuyt a los 3' y, luego, con un centro al área que controló el arquero uruguayo Fernando Muslera.
Uruguay evidenció al inicio dificultades para amar juego en el mediocampo, motivo por el cual sus delanteros recibieron escasas habilitaciones.
Por esto, el equipo de Oscar Tabárez recurrió a las subidas del volante del Porto Alvaro Pereira, quien a los 6' disparó desde lejos al ver al arquero Maarten Stekelenburg adelantado, pero el balón salió desviado.
La apertura del marcador llegó a los 18' por intermedio del zaguero de van Bronckhorst, quien sacó un potente remate cruzado de izquierda desde más de 30 metros, que ingresó en el ángulo y fue inatajable para Muslera.
Golazo para el defensor del Feyenoord, que cumplió en Sudáfrica sus 100 partidos con la selección nacional, de la que se despedirá al terminar esta Copa del Mundo.
Las acciones no sufrieron mayores cambios, salvo una incipiente recuperación de Uruguay, que tuvo su primer remate al arco a los 35' a través de Pereira, que controló Stekelenburg.
Aún sin buscarlo en demasía, Uruguay concretó el empate a los 41', cuando Forlán enganchó de derecha al medio y sacó un potente zurdazo que venció al golero holandés, quien se vio confundido por la trayectoria del balón y no logró desviarla.
El segundo tiempo comenzó con la pelota en poder de Holanda ante un rival que esperaba en su última zona, en un trámite abierto en el que Uruguay apostó al contragolpe.
Pero Uruguay casi sorprende cuando el delantero Edinson Cavani provocó un error de la defensa rival que obligó a Stekelemburg a dejar su arco para rechazar el balón que cayó en los pies de Pereira, cuyo remate fue despejado por la defensa con la portería vacía.
El juego mostró en esos minutos a una Holanda con buen manejo de pelota y ataques rápidos y a un Uruguay firme en defensa y en el mediocampo.
Pero una vez más fue Uruguay a los 65' el que estuvo más cerca de tomar ventaja, cuando un tiro libre de Forlán fue desviado por el arquero de Holanda, que respondió con un remate desviado de Robben.
Holanda logró una diferencia clave con una jugada polémica cuando un remate de Sneijder que se desvió en un defensor y que Robin van Persie intentó tocar (sin lograrlo) en posición adelantada distrajo a Muslera, que no pudo evitar la caída de su valla.
Uruguay ni siquiera tuvo tiempo de reaccionar, porque tres minutos más tarde Robben aumentó la ventaja con un cabezazo milimétricamente colocado junto a un palo del estático Muslera.
A partir de ahí cambiaron los roles, porque Holanda se paró de contragolpe ante un desesperado Uruguay que fue por el descuento y lo logró en tiempo adicionado por medio de Maxi Pereira.