Benjamin Netanyahu. (foto ansa)
Premier israelí afirmó que su gobierno actuó como lo hubiese hecho "cualquier otro país" ante una eventual amenaza de "cohetes y misiles"
JERUSALEN.- El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, rechazó la propuesta de Francia, Gran Bretaña y del secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, para realizar una investigación sobre el ataque que Israel cometió el lunes contra una flotilla humanitaria, que causó al menos 9 muertos y decenas de heridos.
Los ministros del Exterior de Francia, Bernard Kouchner, y su colega británico, William Hague, apoyaron esta tarde la necesidad de que "una comisión investigadora internacional" esclarezca el comportamiento israelí durante el ataque a la flotilla humanitaria. El secretario Ban propuso el sábado que la investigación sea conducida por el ex premier neozelandés Geoffrey Palmer y que incluya a representantes de Turquía, Israel y Estados Unidos.
El presidente Nicolas Sarkozy, también ha "invitado" al premier Benyamin Netanyahu, a aceptar una "investigación creíble e imparcial" sobre el ataque contra la flota que se diría a la Franja de Gaza, informó el Palacio del Eliseo, sede del Ejecutivo.
Sin embargo, el premier israelí dijo que las investigaciones sobre el ataque "deben ser conducidas de manera responsable y equilibrada", previo a la reunión ministerial que encabezó hoy. El gabinete israelí se reunió hoy por primera vez desde la masacre de nueve activistas de la Flotilla de la Libertad, sin que al término del encuentro se difundiera un documento sobre el sangriento episodio.
La única información oficial, fue que el premier Netanyahu habló ayer por teléfono con el vicepresidente estadounidense, Joe Biden, el presidente francés Nicolás Sarkozy, con el premier canadiense Stepehn Harper y con ex premier británico Tony Blair, emisario del Cuarteto Para Medio Oriente que integran Estados Unidos, Rusia, la ONU y la UE.
En todos los casos, el premier israelí afirmó que su gobierno actuó como lo hubiese hecho "cualquier otro país" ante una eventual amenaza de "cohetes y misiles".
"Es necesario examinar con atención y prudencia el carácter de las verificaciones, defendiendo los intereses de Israel y de nuestro ejército", agregó el premier Netanyahu.