Estaba previsto que la Asamblea Nacional retome sus sesiones en el pleno, pero la mayoría oficialista decidió no instalarla por "falta de garantías"
QUITO.- El gobierno de Ecuador decidió renovar hasta el viernes el "estado de excepción" decretado el pasado 30 de septiembre a raíz de una sublevación policial que causó al menos nueve muertos y centenares de heridos.
"Se ratifica la movilización nacional y militar de las Fuerzas Armadas para garantizar la soberanía nacional, el orden interno en toda la república", reza el decreto ejecutivo número 493.
La renovación fue firmada por el presidente Rafael Correa, quien en la mañana aseguraba que la situación "está controlada" y existe "calma en el país".
"La situación fue gravísima, está controlada, sin embargo tenemos estos grupos que deben ser detectados que son tremendamente peligrosos", dijo el presidente a RCN de Colombia.
Horas antes, el canciller Ricardo Patiño consideraba que la crisis política iniciada el pasado jueves no está superada, cuando se cumplía el último día de la declaratoria de emergencia de cinco días.
"Los que dispararon al pueblo que estaba en las calles, los que dispararon a este gobierno, están libres, por lo tanto no está superada la crisis", reconoció Patiño en una reunión con la prensa extranjera.
Según el ministro, esas personas tienen que ser "apresadas y juzgadas", incluidos los "autores intelectuales" que para él son los dirigentes del Partido Sociedad Patriótica, del ex presidente Lucio Gutiérrez (2003-2005), ex coronel del ejército.
Mientras tanto, "tenemos que estar alerta y tenemos que estar organizados y tenemos que fortalecer cada vez más la unidad del país", aseguró Patiño en respuesta a una pregunta de ANSA.
Sin embargo, el canciller no esperaba una reacción inmediata de estas fuerzas, cuando ayer terminaba el estado de excepción y los militares regresaban a sus cuarteles, debido a que las condiciones locales e internacionales la hacen difícil.
Todo es "muy difícil para que vuelvan a intentar alguna cosa en el corto plazo, ojalá no me equivoque", concluyó Patiño, una de las autoridades que convocó a la gente a rescatar a Correa del hospital policial donde estaba recluido.
Estaba previsto que la Asamblea Nacional retome sus sesiones en el pleno, pero la mayoría oficialista decidió no instalarla por "falta de garantías", en medio del rechazo de la oposición.