Pedro Vuskovic. (foto tomada de la OEA)

Intensión del Ejecutivo produce diversas reacciones

La solicitud que hizo el Gobierno de Nicaragua, este viernes, al Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, de retirar inmediatamente a Pedro Vuskovic, representante de este organismo en el país, causó diversas reacciones en el campo político y religioso.

El arzobispo de Managua, Monseñor Leopoldo Brenes, calificó que dicha situación “es triste” porque crea “miedo” en los diplomáticos por “recibir a alguien porque se puede pensar que fueron a hablar mal del Gobierno”.

A través de un comunicado, publicado en los diversos portales a fines al Gobierno, se anunció la posición del Ejecutivo de pedir el retiro de Vuskovic, por supuestos actos de intromisión en asuntos políticos de Nicaragua

Vuskovic en los últimos días no ha emitido declaraciones, pero el Gobierno lo acusa de una “reiterada política injerencista”, según reza la misiva.

Y es que la reacción del Gobierno, actualmente representado por el sandinista Daniel Ortega, se produjo, el mismo día en que la OEA recibió al misionero italiano, Alberto Boschi, quien según aseguró su representante legal Alberto Novoa, a la agencia de noticias AP, sólo expuso su caso sin pedir intervención del organismo internacional.

A Bochi desde el pasado 23 de junio, el Gobierno, le canceló su ciudadanía nicaragüense y desde ese entonces ha presentado diversos recursos ante los tribunales para solucionar su problema, los cuales no han sido resueltos.

El caso es que Bochi, según fundamenta el Ejecutivo, actúo “de una manera dolosa por su nacionalidad italiana y no respetó su nacionalidad nicaragüense”.

Brenes, también aseveró que con dicha actuación de parte de Ejecutivo, hasta “podrían expulsar a un obispo” por emitir alguna opinión.

Mientras tanto, Agustín Jarquín, diputado de la Unión Demócrata Cristiana (UDC), declaró al Canal 12 de televisión que la actitud que presentó el Estado ante la OEA “es una experiencia de intolerancia política... un error político”.

La OEA a la fecha no ha hecho un pronunciamiento oficial, pero de manera extraoficial se conoció que hay “conversaciones”.

Y por su parte el legislador de la Alianza Liberal Nicaragüense, ALN, Ramiro Silva, mencionó que eso responde a un mensaje de que Ortega no desea para los comicios presidenciales del 2011 observadores electorales.

Silva coincidió con el diputado del Movimiento Renovador Sandinista (MRS), Víctor Hugo Tinoco, quien dijo que esta situación es un “obstáculo” del Gobierno ante una posible observación de la OEA en los próximos comicios.

El mismo viernes de la semana pasada, Vuskovic, visitó la cancillería nicaragüense para que se le entregara una notificación, en el cual se le anunció que por medio del embajador de Nicaragua en la OEA, Denis Moncada Colindres, le pidieron a Insulza su retiro del país.