Cifras oficiales, publicadas en el
Facebook de Acevedo.
Porque sale perdiendo la salud y la educación
Este martes la Asamblea Nacional (AN), reformó el Presupuesto General de la República (PGR) con el fin de incorporar mil 658 millones de córdobas, y para su aprobación contó con 59 votos a favor, 5 en contra y 11 abstenciones, la decisión legislativa despertó en el país polémica, porque la salud y la educación resultaron perjudicados.
La diputada Mónica Baltodano del Movimiento Renovador Sandinista (MRS), quien votó contra la reforma, denunció una mutilación al presupuesto del sector salud y educación al existir una disminución respecto al Producto Interno Bruto (PIB).
Mientras tanto el presidente de la Comisión Económica y diputado de la bancada sandinista, Wálmaro Gutiérrez, negó los señalamientos de la legisladora y aseguró que en base a datos del Banco Central de Nicaragua (BCN), esos sectores desde 2007 han registrado un aumento.
Gutiérrez detalló que el presupuesto de este año del Ministerio de Educación (Mined) con respecto al PIB es de 5.4% y en 2007 era del 5.1%. El Ministerio de Salud (Minsa) es de 3.8 por ciento y en 2007 era del 3.4%.
Con la reforma el presupuesto pasó de 31 mil millones 723 mil córdobas a 36 mil millones 953 mil córdobas.
La disyuntiva
Ante esa disyuntiva el economista nicaragüense, Adolfo Acevedo Vogl, indicó que “las personas mienten, pero las matemáticas no”, coincidiendo con las declaraciones de Baltodano.
“Cuando los presupuestos del Mined y el Minsa se miden como porcentajes del PIB, lo que se está reflejando, es el porcentaje de los recursos reales a disposición de la economía que se destina al cumplimiento de las funciones y el logro de los fines de estas entidades”, escribió Acevedo en su muro de Facebook.
¿Quién miente con relación a la disminución de los presupuestos del Mined y el Minsa como porcentajes del PIB?, se preguntó el especialista ecónomo, quien a la vez sostuvo que esas instituciones no son “son entidades cualquieras” porque “las mismas cumplen una función fundamental” en la economía del país.
Acevedo reflexionó que con sólo esos dos sectores se “reflejan las inversiones del sector público en aspectos esenciales para el desarrollo del capital humano de las personas y para el pleno desarrollo de sus potencialidades. Al mismo tiempo que constituyen pre-requisitos y elementos fundamentales para el propio desarrollo del país”.
“Incrementar de manera significativa estas inversiones resulta especialmente apremiante, además, para aprovechar el cada vez más limitado tiempo que resta del denominado bono demográfico”, manifestó el economista.
El país para que pueda cumplir con sus metas en el sector educativo “el presupuesto del mismo como porcentaje del PIB”, debería de representar al menos el 7% del PIB y la parte de salud debería de llegar alrededor del 5%, detalló Acevedo.
Los datos educativos del país reportan que más de medio millón de niños está fuera del sistema escolar, se necesitan más de diez mil docentes en las aulas y los más de 42 mil maestros del país tienen un salario equivalente a 180 dólares.