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Kim Jong Il.
Kim Jong Il, el enigmático líder norcoreano que gobernó su empobrecido país con puño de hierro mientras desarrollaba un programa nuclear armamentista, murió de un ataque cardiaco a sus 69 años.
En una "transmisión especial" efectuada el lunes desde la capital norcoreana, los medios de comunicación estatales dijeron que Kim falleció el 17 de diciembre a consecuencia de un problema cardíaco derivado de una "gran tensión mental y física" durante una "inspección de campo de alta intensidad". Iba a bordo de un tren.
Indicaron también que una autopsia que se le efectuó el 18 de diciembre "confirmó cabalmente" el diagnóstico.
Se cree que Kim sufrió un derrame cerebral en el 2008, pero parecía relativamente vigoroso en fotos y videos de recientes visitas a China y Rusia, así como en numerosos viajes por todo el país cuidadosamente documentados por la prensa estatal. Al mandatario le gustaban los cigarros y el coñac, y se cree que padecía diabetes y enfermedades cardiacas.
"Es la mayor pérdida para el partido ... y es la mayor tristeza de nuestro pueblo y de la nación", afirmó con voz entrecortada una conductora televisiva vestida con un atuendo tradicional coreano color negro. Dijo que la nación debe "cambiar nuestra tristeza en fortaleza y superar nuestras dificultades".
Corea del Sur puso a sus fuerzas militares en "alerta elevada", informaron medios de comunicación surcoreanos, entre ellos la agencia noticiosa Yonhap, y el presidente Lee Myung-bak convocó a una reunión del consejo de seguridad nacional tras enterarse de la muerte de Kim. Las autoridades no pudieron confirmar los reportes de inmediato.
La noticia llega en momentos en que Corea del Norte se preparaba para una sucesión hereditaria. Kim Jong Il heredó el poder después de que su padre, Kim Il Sung, el reverenciado fundador del país, murió en 1994.