El atentado perpetrado en Moscú que causó 35 muertos y más de 100 heridos fue condenado por varios gobiernos latinoamericanos como Argentina, Brasil, Paraguay, Venezuela y Nicaragua.
Por su parte el presidente nicaragüense, Daniel Ortega dijo, en un breve mensaje dirigido al presidente de la Federación Rusa, Dmitri Medvedev, que “estos crímenes exigen la condena unánime del mundo civilizado”.
Ortega, tras mencionar que observó “por televisión las imágenes del terrible atentado terrorista”, anunció que Nicaragua se sumó a “ese repudio y condena, se solidariza, además, con el gobierno y el pueblo de la Federación Rusa y acompaña en su dolor a todas las familias que hoy sufren la ausencia de sus seres queridos”.
Mientras que el gobierno de Argentina manifestó “profunda consternación” y también condenó “al terrorismo en todas sus manifestaciones”.
Dilma Rousseff de Brasil también condenó el atentado y señaló que su país “deplora la acción de grupos radicales que recurren a la violencia contra civiles” y manifiesta su “vehemente condena a atentados de esta naturaleza”.
Venezuela se solidarizó con Rusia y mencionó que “en estos difíciles momentos, la entereza de la nación rusa nos asegura que sabrá reponerse de esta lamentable tragedia”.