DOHA.- Al Gharafa Sports Club es uno de los prestigiosos de Doha, milita en la primera división del fútbol local y es el lugar donde se prepara a los futuros campeones, pensando en el Mundial que Qatar albergará en 2022.
Hoy por hoy son 350 los niños que, divididos en diez categorías, trabajan en un complejo deportivo de ensueños y gozan de una preparación atlética que envidiaría más de un consagrado.
Todo supervisado cotidianamente por cerca de unos veinte entrenadores, la mayoría llegados especialmente desde Europa o países de larga tradición futbolística del norte de África.
El club es presidido por el jeque Hamad Bin Thamer Al Thani, dueño de la cadena de televisión Al Jazira, y fue fundado en 1979 bajo el nombre de Al Ittihad Doha, pero fue rebautizado en 2004 tal como se lo conoce hoy día.
"Hace dos años, en realidad, que comenzamos con este proyecto. Nuestra misión es dotar de estructura al fútbol qatarí y formar a los más jóvenes", explicó el francés Stephane Saillant, técnico de las divisiones inferiores.
En diálogo con ANSA, Saillant reconoció: "Aquí somos muchos extranjeros, pero las reglas imponen al menos tres jugadores nacidos en Qatar por equipo".
La idea, no es necesario aclararlo, es formar a los futuros campeones que integrarán la selección nacional en el Mundial que se jugará dentro de 11 años aquí.