Hosni Mubarak(foto archivo)
Al gobernante destituido se le atribuyen una fortuna de entre 40.000 y 70.000 millones de dólares
EL CAIRO y BRUSELAS.- El fiscal general egipcio ordenó el congelamiento de los fondos en el exterior del ex presidente Hosni Mubarak, de su esposa Suzanne y de sus dos hijos, Gamal y Alaa, además de sus respectivas esposas, mientras el subsecretario de Estado norteamericano para Asuntos Políticos, William Burns, llegó a El Cairo.
Según informaron fuentes judiciales, Abdel Meguid Mahmoud pidió a la Cancillería egipcia que comience con los trámites diplomáticos a tal fin, en base a la convención de la ONU para la lucha contra la corrupción. La misma establece el derecho de los países firmantes a pedir medidas preventivas y a recuperar fondos acumulados por corrupción.
El fiscal emitió un auto para que el ministerio de Exteriores pida inmovilizar los valores financieros e inmuebles del depuesto mandatario y sus familiares en distintos países, básicamente de Europa, añadieron las mismas fuentes.
Según los medios informativos estatales, publicaron el domingo que el ex presidente había remitido a las autoridades judiciales un informe rutinario con detalles de sus activos para negar rumores que le atribuyen una fortuna de entre 40.000 y 70.000 millones de dólares.
El fiscal Mahmoud solicitó además prisión preventiva para cuatro antiguos funcionarios del anterior régimen, entre ellos, Habib El-Adly, Ahmed Al-Maghrabi y Zuheir Al-Garana, ex ministros de Interior, Vivienda y Turismo, respectivamente, y Ahmed Ezz, ex secretario de organización del Partido Nacional Democrático (PND) de Mubarak.
Los cuatros están acusados de corrupción y malversación de fondos públicos, precisó la agencia oficial MENA al apuntar que El-Adly también deberá responder por blanqueo de dinero y especulación, así como por la represión de manifestantes que exigieron la renuncia de Mubarak.
En tanto, el subsecretario de Estado norteamericano para Asuntos Políticos, William Burns, llegó a El Cairo, al igual que lo hizo el primer ministro británico, David Cameron, los cuales buscarán dar su apoyo a los esfuerzos de "transición hacia la democracia", informó la prensa local.
Las visitas son las primeras de altos responsables extranjeros en El Cairo, después de la renuncia del presidente Hosni Mubarak, ocurrida el 11 de febrero pasado, luego de la presión ejercida por las manifestaciones populares que lo obligaron a entregar el poder al ejército.
La agencia MENA explicó que el representante del gobierno de Barack Obama se reunirá con los nuevos dirigentes del país árabe, y con representantes de la sociedad civil.
Por su parte, Cameron, quien se encuentra de gira por la región, se entrevistó con el mariscal Mohamed Husein Tantawi, jefe del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, al mando del país desde la salida de Mubarak.
En el mismo contexto, la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, tiene previsto entrevistarse en El Cairo con los nuevos dirigentes del país, que suspendieron la Constitución y disolvieron el Parlamento y prometieron elecciones libres y el regreso a un poder civil en seis meses.
Círculos cercanos al Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas adelantaron que nuevas caras se integrarán a la remodelación del gobierno que encabeza el primer ministro, Ahmed Shafiq, a fin de aplacar críticas de la ciudadanía.
Entre los posibles nuevos ministros se menciona a Gouda Abdel Khaleq, Mounir Fakhry Abdel-Nour, Abdel Moneim El-Sawy y Yehia El-Gammal, mientras entre los que supuestamente serían removidos se destacan cuatro funcionarios que tuvieron cargos directivos en el PND.
Los ministros de Justicia, Mamdouh Marei; de Asuntos Parlamentarios, Mufid Shehab; de Recursos Humanos, Aisha Abdel-Hady; y de Petróleo, Sameh Fahmi, serían los primeros en ser sustituidos.
En medio de especulaciones sobre otros reajustes, sobre todo en las carteras vacantes de Información, Cultura, Educación y Turismo, el diario Al-Ahram confirmó a Abdel-Nour para esta última, y a El-Gammal para el nuevo puesto de viceprimer ministro.
Con el fin de evitar un vacío de poder, el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas decidió mantener el gabinete nombrado por Mubarak días antes de renunciar y prometió entregar las riendas del país a un civil electo presidente, tras los comicios generales previstos para septiembre.