ROMA. - El premier italiano Silvio Berlusconi sufrió un nuevo revés electoral, al ver cuatro leyes de su gobierno rechazadas en referéndum por más del 90% de los votantes, pocas semanas después de la derrota sufrida por el oficialismo en las elecciones municipales.
El primer dato crucial de la jornada electoral fue sin embargo la alta tasa de participación electoral, que con el 57% superó fácilmente el quórum del 50% más uno, cuando Berlusconi y su principal aliado en la coalición oficialista, Umberto Bossi, líder de la Liga Norte, habían anunciado que no votarían.
El mismo Berlusconi, en una nota de prensa, admitió que "la alta afluencia en los referendos demuestra una voluntad de participación de los ciudadanos en las decisiones sobre nuestro futuro, que no puede ser ignorada".
"Parece evidente que la voluntad de los italianos es clara acerca de todos los temas por los que fueron consultados: el gobierno y el Parlamento tienen ahora el deber de recibir plenamente el resultado de los cuatro referendos", destacó.
Por porcentajes superiores al 94% en todos los casos, los electores decidieron abrogar dos leyes que permitían la participación de empresas privadas en la administración de los recursos hídricos.
Una instituía un programa de energía nuclear y otra permite a los miembros del gobierno usar sus compromisos oficiales como "impedimento legítimo" para no presentarse en audiencias judiciales.
Pero más allá de su impacto inmediato, los referendos representan lo que Roberto Calderoli, ministro de la Simplificación Legislativa y dirigente de la Liga, definió "la segunda bofetada que recibimos, después de la de las elecciones municipales hace dos semanas".
Luego del triunfo de los candidatos opositores en varias ciudades importantes del país -sobre todo en Milán, su capital económica y bastión tradicional del centro-derecha- muchos detectaron lo que la prensa definió "un cambio de viento" desfavorable para la mayoría oficialista.
La oposición exultó ante el resultado electoral, enfocándolo como una nueva derrota para Berlusconi pero sin compartir la misma propuesta política luego del fallo de las urnas.