foto César Pérez
La semana pasada en Playa Azul, localidad de Puerto Sandino, León se prohibió el ingreso de turistas esto debido a un derrame de petróleo del cual no se precisó daño ambiental, pero las fuentes oficiales indican que el problema “está controlado”.
Roberto Araquistáin, viceministro del Ambiente y Recursos Naturales (Marena), en rueda de prensa aseguró que el incidente ocurrió cuando la petrolera Puma Energy bombeaba crudo a través de un oleoducto a una embarcación anclada a 1,5 kilómetros mar adentro.
Por su parte, la petrolera de origen holandés y nueva en Nicaragua, desmintió los señalamientos del Gobierno e informó que “no estuvo involucrada con la raíz del incidente”.
La empresa petrolera aseveró que el origen del problema fue “una tubería rota y en desuso en la planta de Geosa en Puerto Sandino, adyacente a la planta de Puma Energy”.
Araquistáin, afirmó el miércoles que para el control del derrame participó la misma Puma Energy, Albapetroleo y Geosa (empresa energética).
El funcionario de Marena explicó que se logró “detener el avance” del crudo en el mar a través de “barreras flotantes que retienen el material oleoso, el cual al ser contenido es succionado “con bombas especiales” y retiradas
“del área afectada”.
“Estamos en la etapa de controlar la emergencia para que no se nos extienda”, concluyó el viceministro en esa presentación a medios oficiales.