foto J. Cajina
El príncipe de España, Felipe de Borbón, visitó ayer por la mañana a la ex- presidenta de Nicaragua, 1990-1996, Violeta Barrios de Chamorro, quien salió públicamente retratada en algunos medios informativos.
Es la primera vez que a la ex- mandataria se le observa públicamente después que sus hijos Pedro, Carlos Fernando, Claudia Lucía, Cristiana emitieron un comunicado el 27 de mayo del año 2011, reconociendo que estaba delicada de salud.
En esa ocasión los hijos informaban a la opinión pública que “Doña Violeta ha sido diagnosticada con un tumor cerebral, no obstante, se encuentra estable y con muy buen ánimo en su casa de habitación”. En ese comunicado los hijos de la ex presidenta hacían exhortaciones a los medios de comunicación, además de agradecer las muestras de solidaridad, en la cual los invitaban a “respetar la privacidad de su madre y de la familia y que mantendrían informada a la opinión pública por este medio”, se leía en ese comunicado emitido hace algunos meses atrás.
Doña Violeta Barrios de Chamorro estuvo en el poder en el período del 25 de abril de 1990 al 10 de enero de 1997. Ascendió al gobierno derrotando en ese entonces al candidato presidencial Daniel Ortega Saavedra y su fórmula el escritor y ahora disidente del FSLN, Sergio Ramírez Mercado, el 25 de febrero de ese año.
El príncipe de Asturias y heredero de la corona española, Borbón, estuvo reunido con la ex-presidenta Chamorro y lo acompañaban el embajador de España en Nicaragua, León de la Torre Krais; el Secretario de Estados de la Corona para Iberoamérica, Jesús Gracias; y el Subsecretario de Estado de la Política para México y Centroamérica, José Antonio Pérez.
Ayer en la sede de la embajada de España en Managua, el príncipe Felipe de España, se reunió en un almuerzo con el asesor económico del presidente Daniel Ortega Saavedra, el líder de los empresarios agrupados en el Consejo Superior de la Empresa Privada, COSEP, José Adán Aguerri y el yerno de la ex presidenta Chamorro y ex- secretario de la presidencia, Antonio Lacayo Oyanguren.
El triunfo de doña Violeta fue considerado en la historia política del país y del mundo una experiencia sui-géneris, ya que un movimiento guerrillero como el FSLN que había llegado al poder por las armas al derrotar en alianza con otros sectores sociales y políticos a la dictadura militar de 45 años de la familia Somoza, accedió a entregar pacíficamente el poder al nuevo gobierno electo cívicamente y por los votos de los electores. Fueron las elecciones más supervigiladas de Latinoamérica y el país vivía una guerra de baja intensidad llamada la guerra de los contras promovida por el gobierno norteamericano de ese entonces. La situación se caracteriza también porque en el mundo se daba la llamada Guerra fría entre las dos superpotencias mundiales y nucleares de ese entonces, los Estados Unidos y la desaparecida, ex Unión Soviética.
El Príncipe Felipe de Borbón de España estuvo en la ceremonia oficial de juramentación del presidente Daniel Ortega Saavedra el pasado 10 de enero. Ocupó un lugar importante entre los personajes internacionales que asistieron a la toma de posesión presidencial por tercera vez de Ortega. Fue sentado a la derecha de la primera dama Rosario Murillo Zambrana. Seguido de Ortega estaban los presidentes de Venezuela Hugo Chávez y el mandatario de Irán, Mahmud Admadinejad. Los presidentes centroamericanos Mauricio Fùnez de El Salvador, Porfirio Lobo de Honduras, el recién electo de Guatemala Otto Pérez y el saliente Alvaro Colom estaban en la lista de mandatarios de Centroamérica que estuvieron en los actos oficiales de ascenso de Ortega al poder.
