El ex dictador de Panamá, Manuel Noriega, quien gobernó el país centroamericano entre 1983 y 1989, exige mejoras en las condiciones de reclusión: pidió que en su celda instalen un televisor, un aire acondicionado y una computadora con acceso a Internet.

Los abogados de Noriega aseguran que no se trata de privilegios, sino del confort al que el ex dictador se acostumbró durante su estancia en las cárceles de Francia y EE. UU.

A mediados de diciembre pasado, Noriega fue extraditado de Francia donde fue condenado en 2010 a siete años de prisión por el lavado de 2.300.000 euros obtenidos de la venta de cocaína. En Panamá está procesado por el asesinato de su rival político Hugo Spadafora, quien fue hallado decapitado en 1985.

Noriega fue detenido en 1990 durante la invasión estadounidense a Panamá. En 1992, la Justicia estadounidense lo sentenció a 40 años de cárcel por extorsión y corrupción. Posteriormente el tiempo de reclusión le fue reducido primero a 30 años y luego a 20 por buena conducta. En 2010 fue extraditado a Francia por delitos de narcotráfico y lavado de dinero.

Anteriormente el actual presidente de Panamá, Ricardo Martinelli, declaró a los medios que las condiciones de reclusión de Noriega no se diferenciarían de las de un preso común y por ende no tendrá ningún privilegio. No obstante, señaló que Noriega puede solicitar el arresto domiciliario, dada su avanzada edad (76 años) y su estado de salud.