LA HABANA - La guerrilla más antigua de Latinoamérica, las FARC anunció ayer su primer cese al fuego después de 10 años, después de una decisión con la que esperan encontrar una mejor facilidad a las negociaciones de paz con el Gobierno comenzadas en Cuba.
El Gobierno de Colombia, resguarda su posición de mantener las operaciones militares contra los rebeldes hasta que se logre firmar un acuerdo final e incluso se compromete a intensificar la ofensiva.
El alto el fuego de 60 días fue anunciado por el jefe negociador de las FARC Iván Márquez y espera la paralización de las acciones militares y los deterioros contra el sistema público y privado, iniciando desde la medianoche de ayer el 20 de enero de 2013.
"Esta decisión política de las FARC-EP es una contribución decidida a fortalecer el clima de entendimiento necesario para que las partes que inician el diálogo alcancen el propósito deseado de todos los colombianos", indica el comunicado leído por Márquez a periodistas internacionales en La Habana.
Miles de personas han perdido sus vidas en el conflicto, que a la vez ha provocado el desplazamiento de millones de personas durante los casi 50 años que tienen las FARC, por lo que alcanzar la paz estaría dando un mejor respiro al país, una de las principales economías de América Latina.
"Este es un proceso que tiene que ser serio, digno para las partes, pero eficaz, realista. Es fundamental la discreción", aseguró el jefe del equipo negociador del Gobierno, el ex vicepresidente Humberto de la Calle, antes del anuncio de las FARC de cese al fuego.