Anticuerpo es una palabra bastante sonada en el mundo de la medicina. A menudo, una persona deseará fortalecer sus anticuerpos, y no todo el tiempo es fácil de lograrlo. Esto es cierto, pero el conocimiento de los anticuerpos puede ir más allá. Un anticuerpo es una proteína producida por las células B en el cuerpo de un individuo. Son identificables y se ligarán ellas mismas a los antígenos con el propósito de bloquear los efectos que provocaría en un cuerpo humano. Existen varias clases diferentes de anticuerpos y se pueden describir de muchas formas. A menudo se dividen en áreas que explican cómo se forman y cuál es su función.

Anticuerpos Monoclonales

Los anticuerpos monoclonales son anticuerpos que son creados por células inmunes idénticas. Básicamente son los clones de las células madres. Son diferentes de los anticuerpos policlonales gracias a que son clones. Casi cualquier sustancia es capaz de tener estos anticuerpos monoclonales adheridos. Una vez que estén adheridos, detectarán o purificarán la sustancia. Existen varios modos diferentes de crearlos y una extensa variedad de utilizaciones en su lucha contra enfermedades. Con estos anticuerpos, se evita el progreso de algunos cánceres, artritis y el rechazo de órganos.

Anticuerpo Policlonal

Un anticuerpo policlonal también se origina de los recursos de las células B. Ellos se originan de las inmunoglobulinas y son antígenos específicos. Son usados para ayudar a fortalecer un sistema inmune, logrando así que una persona tenga protección contra diferentes tipos de enfermedades. Hay distintas maneras en las que estos y otros anticuerpos son producidos y colectados. Todos incluyen diferentes sueros sanguíneos de mamíferos, los cuales son extremadamente beneficiosos en la lucha contra dolencias y enfermedades comunes. El estudio de los anticuerpos policlonales incluye formas para eficazmente obtener suero de alta calidad proveniente de distintos mamíferos para que se pueda crear grandes cantidades de buenos anticuerpos.

Producción de Anticuerpos

Para este proceso se eligen mamíferos, preferiblemente grandes. El propósito de elegir mamíferos de este tamaño es porque se les puede sacar más cantidad de plasma sanguíneo, y por lo tanto existe mayor posibilidad para conseguir componentes de anticuerpos. El conejo es el animal más usado para la producción de antígenos policlonales, aunque no es el único, ya que para este procedimiento también se utilizan pollos, cabras, conejillos de india y hámsteres. Tanto los anticuerpos monoclonales como los anticuerpos policlonales son evidencias de los grandes progresos científicos, y prueba de que aún hay varios chances para localizar curas para enfermedades que por ahora se consideran incurables.

Cuando se trata de anticuerpos monoclonales y cómo se producen, el proceso científico es asombroso. Estos anticuerpos de clonación se pueden producir in-vitro, logrando así que sean totalmente humanos. Tradicionalmente los anticuerpos han sido creados mediante la fusión de diferentes células en un ratón que haya sido inmunizado contra algo específico. Ambos procesos son de gran importancia para prácticas médicas. Estos anticuerpos son la clave para resolver muchas enfermedades y problemas que padecen los seres humanos.