Muchos cirujanos estéticos creen que la liposucción y la lipoescultura son, básicamente, dos nombres para el mismo tipo de procedimiento. Otros señalan que la liposucción por lo general trata de eliminar los depósitos de grasa en lugares del cuerpo de gran tamaño. La lipoescultura, sin embargo, no solo implica la eliminación de tejido graso, sino que reubica la piel, con el fin de lograr el contorno del cuerpo.

Si la liposucción por lo general consiste en extraer depósitos de grasa muy grandes, entonces la lipoescultura es el tipo de cirugía estética en la que se eliminan pequeños depósitos de grasa, como los que a menudo se encuentran debajo de la barbilla, o la remodelación de pequeños depósitos grasos, alrededor de las pantorrillas y los tobillos. La liposucción y la lipoescultura se realizan generalmente de la misma manera, utilizando el mismo tipo de equipo.

La mayoría de los cirujanos consideran la liposucción tumescente al ser la más segura y la técnica más eficaz para la liposucción y la lipoescultura. La liposucción tumescente general consiste en inyectar una sustancia química en la piel, que ayuda a romper el tejido graso, una cánula o tubo quirúrgico pequeño, se inserta bajo la piel mediante una pequeña incisión, y un dispositivo de vacío se emplea para succionar el tejido graso. La principal diferencia entre liposucción y lipoescultura es el volumen de tejido graso retirado en cada procedimiento. La liposucción es más utilizada para referirse a la eliminación de depósitos de grasa grandes del abdomen, los muslos y las caderas. La lipoescultura, que utiliza microcánulas, por lo general se centra más en la eliminación de pequeños depósitos de grasa, como las que a menudo se encuentran debajo de la barbilla, debajo de los brazos, o alrededor de las piernas.

Ambos procedimientos normalmente eliminan las células de grasa de la zona de tratamiento de forma permanente. Los expertos creen que los depósitos grasos no pueden volver a aparecer después de la liposucción o lipoescultura. Estos procedimientos son herramientas para mejorar el contorno corporal, pero no se utilizan generalmente para producir pérdida de peso. Los mejores candidatos para estos procedimientos son en general, personas menores de cuarenta años, que tengan un peso saludable y no fumen. La liposucción y la lipoescultura se utilizan para eliminar los depósitos grasos y las formas corporales abundantes que han demostrado ser resistentes a los regímenes de dieta y ejercicio.