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Presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy, refiriéndose al premio Nobel 2012 otorgado a la UE.
“Este premio es el más grande reconocimiento a los profundos motivos políticos detrás de nuestra Unión: el esfuerzo único de estados cada vez más europeos que trabajan juntos para superar la guerra y las divisiones y construir un continente de paz y prosperidad. Se trata de un premio no sólo para el proyecto y las instituciones que encarnan un interés común, sino también para los 500 millones de ciudadanos que viven en nuestra Unión", expresaron en declaración conjunta y el Presidente de la Comisión, José Manuel Barroso, en relación al Premio Nobel de la Paz 2012 otorgado a la Unión Europea.
El Comité Noruego del Nobel entrega esta distinción a la Unión Europea en reconocimiento a su labor en favor de la reconciliación, la democracia, la promoción de los derechos humanos y el fomento de la paz y la estabilidad en todo el continente.
En los años de guerra, el Comité Noruego del Nobel otorgó varios premios a personas que buscaban la reconciliación entre Alemania y Francia. Desde 1945, esa reconciliación se ha convertido en una realidad. El terrible sufrimiento provocado por la Segunda Guerra Mundial demostró la necesidad de una nueva Europa. Durante un período de setenta años, Alemania y Francia se enfrentaron en tres guerras, pero hoy una nueva guerra entre estas naciones es impensable. Esto muestra cómo, a través de esfuerzos bien dirigidos y la construcción de la confianza mutua, los enemigos históricos pueden convertirse en los socios más cercanos.
"En la UE, países que habían sido enemigos históricos han pasado a ser grandes socios y amigos. Me siento orgullosa de colaborar en esta tarea. La creación del Servicio Europeo de Acción Exterior nos ha permitido desarrollar una visión integral para promocionar mejor nuestros valores compartidos en todo el mundo. Continuaré trabajando sin desmayo para que este proceso siga adelante", declaró Catherine Ashton, Alta Representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, y Vicepresidenta de la Comisión Europea.
En la década de los ochenta, Grecia, España y Portugal se unieron a la UE. La instauración de la democracia fue una condición para su membresía. La caída del muro de Berlín hizo posible la adhesión a la UE de varios países de Europa Central y Oriental, lo que abrió una nueva era en la historia europea. La división entre el Este y Occidente ha llegado a su fin, la democracia se ha fortalecido y muchos conflictos nacionales de origen étnico han sido resueltos.
El ingreso de Croacia como miembro de la UE el próximo año, la apertura de negociaciones de adhesión con Montenegro y la concesión del estatuto de candidato a Serbia fortalecen el proceso de reconciliación en los Balcanes. En la última década, la posibilidad de adhesión a la UE de Turquía también ha contribuido a la democracia y los derechos humanos en ese país.
La UE se encuentra actualmente en graves dificultades económicas y en un malestar social considerable. El Comité Noruego del Nobel con la entrega de este reconocimiento desea centrarse en lo que ve como resultado más importante de la UE: el éxito de la lucha por la paz, la reconciliación, la democracia y los derechos humanos. El papel que ha desempeñado la UE en la construcción de la estabilidad ha ayudado a que la mayor parte de Europa se transformara de un continente de guerra a un continente de paz.
El trabajo realizado por la UE representa la fraternidad y la paz entre las naciones, dos criterios que Alfred Nobel consideró en su testamento de 1895 como elementos fundamentales para el otorgamiento del Premio de la Paz.
La Unión Europea seguirá promoviendo la paz y la seguridad a nivel mundial. "Estamos orgullosos que la Unión Europea sea el mayor proveedor mundial de ayuda al desarrollo (53.1 billones de euros en el 2011) y de ayuda humanitaria (14 billones de euros en las últimas dos década con presencia en 140 países) y que esté a la vanguardia de los esfuerzos mundiales para combatir el cambio climático y promover los bienes públicos globales", manifestaron los altos representantes del Consejo Europeo y de la Comisión Europea en su declaración conjunta.