Washington - El mandatario estadounidense, Barack Obama, y la primera dama, Michelle Obama, visitarán hoy el memorial del Pentágono para dar un homenaje a las víctimas de los atentados del 11-S y el hospital militar Walter Reed, en el aniversario número 11 de los ataques, informó la Casa Blanca.
Obama y su esposa Michelle estarán primero en un "momento de silencio" con el personal de la Casa Blanca para después dirigirse al Pentágono, en las afueras de Washington, lugar donde impactó uno de los aviones secuestrados por los terroristas, para estar en el memorial por las víctimas.
El gobernante "espera y sabe que los estadounidenses se tomarán un momento para reflexionar sobre los acontecimientos del 11 de septiembre de 2001", afirmó el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney.
Además, esta es una nueva oportunidad para "recordar a las víctimas y a sus familias", y "todo lo que hemos pasado juntos desde entonces", agregó el portavoz.
El presidente y la primera dama se desplazarán al hospital militar Walter Reed, en Bethesda (Maryland), para visitar a soldados heridos y a sus familiares.
Obama la semana pasada declaró "tres días nacionales de rezo y recuerdo" por las víctimas de los atentados del 11-S.
"Pido al pueblo estadounidense que honre y recuerde a las víctimas del 11 de septiembre de 2001 y a sus seres queridos a través de la oración, la contemplación, servicios religiosos en su memoria, visitando monumentos, haciendo sonar campanas, vigilias con velas u otras ceremonias", indicó a través de un comunicado el presidente.
Obama pidió nunca olvidar a las víctimas de los atentados, que hicieron a EEUU estar en "sus más oscuros días".
Los atentados del 11 de septiembre de 2001 tomaron la vida de aproximadamente 3.000 personas en las Torres Gemelas de Nueva York, en el Pentágono y en un terreno baldío en Shanksville (Pensilvania), en donde cayó el último de los aviones secuestrados por los terroristas.
Los ataques fueron manejados por terroristas de la red Al Qaeda a través de Osama bin Laden, muerto en mayo de 2011 en una operación de las fuerzas especiales del gobierno estadounidense en Pakistán.
"Durante el encuentro, el presidente y sus asesores discutieron políticas de seguridad específicas aplicadas por el gobierno para prevenir ataques relacionados con el 11S y los pasos dados para proteger a ciudadanos e instalaciones estadounidenses tanto en EE.UU como en el exterior", informó un comunicado de la Casa Blanca.