BEIRUT – De acuerdo al último reporte han habido 78 muertos, de estos 16 eran niños, resultado de fuertes bombardeos aéreos de los leales al régimen en varias ciudades de Siria, de acuerdo a los comités de coordinación local opositores.

Las mismas fuentes hicieron la denuncia que el régimen hizo la utilización de armas químicas durante los ataques más recientes.

Los comités afirmaron que de los 16 infantes muertos, 10 de ellos fueron el resultado de ataques del régimen de damasco en Qabun, un barrio con bases de rebeldes al noreste de la capital.

Además los opositores obtuvieron los nombres de las víctimas pequeñas, de estas edades afirman que fueron variadas edades entre los 10 y 1 años.

Un video que se publicó en Internet por los activistas hacen la demostración de decenas de casas destruidas por las bombas, con los residentes que hacen la búsqueda de víctimas desesperados entre los escombros. También hay fuertes imágenes de niños muertos, con sus cuerpos hecho pedazos por las explosiones.

Los comités hicieron la denuncia que la oposición han hecho denuncias en el último mes, que desde el 19 de marzo, se ha utilizado armas químicas durante ataques en los suburbios de Homs, en Aleppo y en el este de Damasco.

En otro lado, la destrucción de gran parte de la mezquita de Omari, en la ciudad siria de Daraa, es el "enésimo acto bárbaro del régimen de Bashar al Assad", según los mismos opositores.

"La mezquita no es sólo un símbolo religioso, sino también político. Es en esa mezquita donde Ahmad Alsayasneh dio el primer discurso de la revolución y es de donde partieron las primeras manifestaciones", sostuvieron los comités en un comunicado.

Por otro lado, el presidente egipcio, Mohamed Morsi, hizo advertencias que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas tiene que asumir "su responsabilidad" para lograr el encuentro de una solución a la crisis siria, durante una reunión que sostuvo con el enviado especial de ONU y la Liga Arabe, Lakhadar Brahimi.

La presidencia egipcia informó a través de un comunicado que Morsi externó la necesidad de desplegar "una voluntad seria y rápida a nivel sirio, regional e internacional" para buscar una solución a la crisis.

Brahimi realizará un viaje a Nueva York, donde hará la presentación al Consejo de Seguridad un informe sobre la evolución de la crisis siria, que ha dejado ya más 70.000 muertos.