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La adicción al sexo es una enfermedad que comparte rasgos con el alcoholismo.
Además, otro trabajo liderado por la responsable de la Unidad de Juego Patológico del Hospital de Bellvitge (Barcelona), Susana Jiménez-Murcia, y para el que han participado 2.249 pacientes, ha concluido que las adicciones al sexo y al juego tienen niveles de psicopatología similares y rasgos de personalidad compartidos.
Sin embargo, existen características y conductas específicas de cada grupo como son el deterioro, el descontrol, la dependencia y el síndrome de abstinencia. En este sentido, Josep Maria Farré, una eminencia nacional en materia de sexualidad, advierte del problema de utilizar el término adicción para hacer referencia a la sexualidad y a otros conceptos como hipersexualidad o impulsividad.
Por ejemplo, la adicción al sexo se suele definir como la necesidad impulsiva de mantener relaciones sexuales de un modo repetitivo y mecánico. "Sin embargo, existe un problema terminológico y, en lugar de adicción, algunos lo describen como un impulso sexual, excesivo y descontrolado", aclara Farré.
Este impulso viene marcado por la biología de cada persona, pero también está influido por otros factores externos. "Muchos pueden pensar que la adicción al sexo es una suerte y no un problema de salud, pero los que la sufren pueden destruir su estabilidad emocional, sus relaciones familiares y sociales, sus trabajos e incluso sus medios económicos por causa de este impulso que resulta imposible de frenar», explica Farré, quien incide también en cómo "las parejas de los adictos al sexo experimentan una gran frustración y soledad."
Asimismo, el experto considera que quien mejor ha prodigado la sensibilidad popular acerca de este tipo de adicción es el actor norteamericano Michael Douglas. Fue el primero en abrir el debate sobre la adicción al sexo de los famosos de Hollywood.
La adicción al sexo es más común en los hombres
Por otra parte, han existido casos muy polémicos y mediáticos como el del golfista Tiger Woods, que hace dos años sorprendió a todos sus admiradores declarando su adicción al sexo, problema que le llevó a ingresar en una clínica de rehabilitación. Pero la lista es larga: Charlie Sheen, Jesse James (ex marido de Sandra Bullock), Russell Brand (ex de Katy Perry), Rob Lowe, David Duchovny...
¿Qué tienen en común todos ellos? Los expertos señalan como factores desencadenantes el consumismo, la importancia de la imagen, la baja autoestima, la intolerancia a las frustraciones, el ser muy impulsivo o los llamados 'buscadores de sensaciones'.
La conducta sexual se transforma en un problema cuando el impulso no se puede controlar y no se puede pensar en otra cosa. Es una verdadera esclavitud que suele acompañarse de una gran culpabilidad", comenta el especialista quien también aconseja "aceptar el problema, someterse a tratamiento psicológico y/o farmacológico, así como a terapia cognitiva conductual (tanto individual como en grupo)".