BOGOTÁ - El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, manifestó ayer en que un eventual acuerdo de paz derivado de los diálogos de paz que desarrolla su Gobierno en Cuba con las FARC no tendrá que ser ante su posible reelección en las elecciones de 2014.
"Espero que el éxito del proceso de paz no dependa de la reelección. En este momento depende de mí, pero en caso de que se llegara a presentar un cambio de Gobierno, esperaría que quedara en manos de una persona que esté comprometida con la paz", dijo Santos en una entrevista con Noticias RCN Televisión.
El Gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) mantiene desde noviembre del año pasado, un diálogo para alcanzar salidas políticas al conflicto colombiano que ya va más de los 50 años.
Las partes hablan en estos momentos de la eventual participación de las FARC en política tras alcanzar un primer punto del acuerdo: el referente al problema de la distribución de las tierras.
De otro lado, en un tono sarcástico, Santos señaló que la gente dice que se ha convertido en verdadero "santo" porque ha logrado que el senador izquierdista Jorge Robledo, se haya vuelto uribista y que el expresidente Álvaro Uribe (2002-2010) acompañe al Polo Democrático (izquierda).
"Eso es un verdadero milagro y eso lo que significa es que estamos haciendo las cosas bien, porque cuando uno tiene a esos extremos, la extrema derecha y la extrema izquierda en contra, algo bien tienes que estar haciendo. Dios los cría y ellos se juntan", remarcó Santos en la entrevista.
Agregó que el uribismo "está muy radicalizado en sus posiciones", lo que le produce alguna extrañeza pero que eso, a la postre, lo que demuestra es desespero en esa fuerza política.
"Cuando uno llega a esos extremos y llega a acusar y decir que nosotros le estamos entregando el país a Fidel Castro y al chavismo, y van y hacen esa acusación en Nueva York y en Washington, la gente se muere de la risa", dijo Santos con sorna al señalar que esos no son argumentos, sino historias "fantásticas".