Los activistas ambientalistas hondureños dejaron sentir su preocupación por la forma en que el presidente electo de Honduras, Juan Orlando Hernández, estará administrando el tema del medio ambiente, ya que el nuevo mandatario es considerado un aliado de empresas que extraen los recursos naturales.

"Estamos completamente incómodos, Hernández es el autor intelectual de una nueva ley de minería en Honduras que está más inclinada a entregar los recursos naturales a las grandes corporaciones trasnacionales", aseguró a un medio internacional el líder del Comité Ambiental de Valle de Siria, Carlos Amador.

Un conglomerado de ambientalistas y opositores a las extracciones mineras de Centroamérica sostuvieron un encuentro la semana pasada en Managua, entre estos la delegación hondureña, que hizo mostrar su preocupación por los recursos naturales de su país.

"Como presidente del Congreso Nacional aprobó en abril la ley de minería, hizo reformas a la ley de municipios para que únicamente sea el alcalde el que decida sobre los recursos naturales, y también la ley de las ciudades modelo (Ley Orgánica de las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico, ZEDE), todo para confiscar tierras", explicó la representante de la Red Ambientalista de los Municipios Comayagua y La Paz (Redamucop), Bertila Saravia.

La ZEDE, que es promovida por el mismo Hernández y aprobada en junio pasado, fue especialmente polémica en Honduras, por lo que propone la instauración de "ciudades modelo" que sean administradas bajo un régimen especial, con personería jurídica propia.

"Eso es nada menos que entregarles los recursos hídricos, los bosques, las montañas, a las grandes empresas", aseguró Amador.

Según Saravia, Hernández dejó "sin ninguna protección a la población ni a los recursos naturales de Honduras, y eso será peor ahora que es presidente".

Lo más peligroso a lo inmediato es que la gente irá a protestar en defensa de sus recursos, dijo Amador, "entonces va a haber represión, porque la lucha ambiental se va a ver como un acto criminal".

Un 35 % del territorio hondureño se encuentro en la actualidad bajo concesión minera, lo que trae malos resultados a 16 de 18 departamentos del país, aseguró Amador.