Tras la renuncia del papa Benedicto XVI, el pasado 11 de febrero, los usuarios de la red social Twitter se preguntaban qué sucederá con la cuenta del pontífice. La respuesta es que “será suspendida”, el mismo día en que abandone su cargo este próximo 28 de febrero, aseguró el diario La Stampa.
El pontífice abrió su cuenta en Twitter el 12 de diciembre del año anterior, fecha en la que destacó “la importancia de las redes sociales para evangelizar”.
Benedicto XVI sólo tuiteó 35 veces en su cuenta de español y el último mensaje lo envió el 17 de febrero tras rezar el penúltimo Angelus desde la ventana de su despacho del Palacio Apostólico, según detalla la publicación.
La cuenta del papa es @pontifex y se emitían mensajes en latín, alemán, español, inglés, italiano, portugués, francés, polaco y árabe.
Las redes sociales hoy están más presentes en la iglesia y ante ello, el Vaticano, prohibió a los cardenales Twitter durante el cónclave que próximamente elegirán al sucesor de Benedicto XVI. De los 117 cardenales sólo 9 tienen cuentas activas en la red social.
Entre los cardenales twitteros están: Angelo Scola (Milán), Timothy Dolan (Nueva York), Gianfranco Ravasi (Vaticano), Odilo Scherer (Sao Paulo), Wilfrid Napier (Durban), Lluíz Martínez Sistach (Barcelona) y Rubén Salazar (Bogotá) entre otros.