Las autoridades mexicanas se mantienen bajo alerta ante posibles movimientos de los miembros de Los Zetas, después del golpe a esa organización criminal con la detención de su máximo líder, Miguel Ángel Treviño Morales, alias “Z40”, aseguró una fuente oficial.

El portavoz del Gobierno mexicano en temas de seguridad, Eduardo Sánchez, declaró a la cadena Televisa que están “al pendiente” de un posible aumento de violencia a raíz por la detención del capo de Los Zetas.

El presidente de México, Enrique Peña Nieto, manifestó que la captura del líder del cártel ocurrió por la “buena coordinación” entre los distintos niveles de Gobierno para combatir el crimen. “Cuando hay coordinación, uso de inteligencia y de tecnología para realmente combatir a la delincuencia y la criminalidad se pueden tener resultados de manera muy eficaz”, aseguró el mandatario a través de un acto celebrado en la ciudad de San Luis Potosí.

El trabajo de la Marina, que realizó la detención de “Z40” y dos sujetos en coordinación con otras corporaciones de seguridad, “nos permite tener información de posibles movimientos de otros de sus cómplices y estamos alertas”, aseguró Sánchez.

De la identidad de Treviño Morales, el funcionario manifestó que no hay ninguna duda, ya el propio capo lo ha aceptado, además de que “se le han hecho comparaciones con fotografías y comprobado algunas señas particulares que él tiene”.

El portavoz indicó que durante la madrugada alias “Z40” estuvo en las instalaciones de Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO, fiscalía antidrogas) pero dijo desconocer el contenido de sus declaraciones. Añadió que pronto se determinará la cárcel de máxima seguridad a la que será trasladado el capo del narcotráfico.

El líder de Los Zetas, que tenía siete órdenes de detención por delitos de delincuencia organizada, narcotráfico, homicidio y tortura, entre otros, fue detenido la madrugada del lunes en “flagrancia” cuando se desplazaba por un camino de tierra cerca de la ciudad de Nuevo Laredo, en el estado de Tamaulipas, noreste del país.

Sánchez recordó que en la camioneta en la que viajaba Treviño Morales, de 40 años, con otras dos personas, al parecer un escolta y su contador, encontraron ocho armas largas, alrededor de 500 cartuchos de munición y 2 millones de dólares en efectivo.