Desde inicios de año los países sudamericanos (en especial los integrantes del Mercosur) han especulado con la recuperación de la economía brasileña como impulsor del crecimiento regional. Desafortunadamente los números del primer semestre muestran un deterioro de las principales variables.
El Banco Central de Brasil redujo la proyección de crecimiento de la economía en 2013 de 3,1% a 2,7%. Las estimativas de otras instituciones financieras locales para la expansión del PBI son inclusive más pesimistas que las de la autoridad monetaria, situándose en el 2,4% para el corriente año y 3,1% para el próximo. La inflación medida por al Índice Nacional de Precios al Consumidor Ampliado, alcanzará el nivel de 6%, por encima del 5,7% proyectado con anterioridad. Si bien los números se encuentran muy por encima de la meta del Banco Central, la cual era del 4,5%, están dentro del “margen de tolerancia” de más/menos dos puntos.
El Bovespa, principal índice de la bolsa de San Pablo, arrojó una pérdida de 22% en el primer semestre, siendo este el peor resultado desde la explosión de la crisis financiera internacional en 2008. Los inversores dan por sentado que el año 2013 terminará en números rojos.
El Real también mostró un comportamiento descendente. La moneda local se devaluó 9,15% durante los primeros seis meses del año hasta las 2,23 unidades por dólar. Vale remarcar que la divisa estadounidense se valorizó en casi todos los mercados emergentes. El motivo: versiones sobre una reducción de los estímulos de la Reserva Federal de los Estados Unidos. En otras palabras, el movimiento en la cotización del Real excede a las cuestiones netamente locales.
El frente fiscal se vio igualmente deteriorado. Las cuentas de todo el sector público (incluyendo los niveles Federal, Estadual y Municipal) cerraron los primeros cinco meses del año con un superávit primario acumulado de 20.900 millones de dólares (2,45% del PBI), cifra inferior los 28.200 millones (3,56% del PBI) del mismo período en 2012.
Por último, la proyección del déficit de cuenta corriente para todo 2013 según el Banco Central será de 3,22% del PBI. El mayor en términos porcentuales desde 2001 y el más grande en valores absolutos desde el inicio de la serie histórica.