Una carretera clave de Sudamérica que conecta Bolivia y Paraguay está siendo bloqueada por una tribu indígena enfadada por la rápida destrucción de su, cada vez más reducida, isla de selva.
Los indígenas ayoreos bloquearon hoy la ruta Transchaco que forma parte de la carretera Panamericana y han prometido que mantendrán su protesta hasta que los foráneos que han ocupado sus tierras sean expulsados.
Los indígenas han mostrado su indignación ante la invasión ilegal de su tierra por dos ganaderos paraguayos en el área que fue reconocida legalmente como su territorio hace 16 años.
Los ganaderos y sus trabajadores han realizado alambrados, tala de palo santo y reclaman que la tierra les pertenece. En sus trabajos fueron protegidos por la policía, para prevenir cualquier intento por parte de los ayoreos de detenerlos.
Aunque la mayoría del pueblo ayoreo ya ha sido contactado, se sabe que algunos grupos permanecen sin contactar en el bosque, incluso dentro del área que actualmente está bajo amenaza.
Los ayoreos han declarado a Survival International: “No reconoceremos la presencia de ninguna otra persona ajena a nuestras comunidades en nuestro territorio, ya que esto significa un peligro para nosotros y para nuestros parientes en el monte. Estaremos manifestándonos hasta que haya una solución a nuestra petición de que todas las personas extrañas salgan de nuestra tierra”.
El Director de Survival International, Stephen Corry, declaró hoy: “Los ayoreos están muy enfadados ante el hecho de que una de las partes de su territorio, precisamente la que han logrado que fuera reconocida en propiedad, está siendo invadida por foráneos, con la connivencia de la policía local. Aparentemente las autoridades de Paraguay favorecen a los ricos y poderosos por encima de los ayoreos, quienes simplemente quieren vivir en paz en su propia tierra”.