CIUDAD DEL VATICANO - Se realizó una pequeña pero significativa fiesta familiar al papa Francisco después de un encuentro con los representantes de las Iglesias, las comunidades eclesiásticas y de otras religiones.
En un salón contiguo al Aula Pablo VI –de acuerdo al diario vaticano L' Osservatore Romani- se reunió con varios argentinos representados por el presidente de la Conferencia Episcopal de ese país sudamericano, monseñor José María Arancedo, arzobispo de Santa Fe.
La fiesta fue una mezcla de todos los ingredientes de celebración "en familia", desde la felicidad de varios niños presentes al afecto de los parientes y amigos, los regalos y los recuerdos.
El papa argentino Jorge Mario Bergoglio se tomó una fiesta afablemente con todos ellos, intercambió saludos, estrechó manos y abrazó a muchos.
En el grupo no hicieron falta algunos miembros de la Acción católica Internacional junto con el obispo Domenico Sigalini, y otros agentes de la pastoral de la arquidiócesis de Buenos Aires.
También estuvieron en la "fiesta argentina" con los cardenales de esa país Leonardo Sandri, Estanislao Esteba Karlic y Marcelo Sánchez Sorondo, con varios representantes del episcopado argentino, entre estos el auxiliar y pro-vicario de Buenos Aires, monseñor Eduardo Horacio Garcia. El embajador argentino ante el Vaticano, Juan Pablo Cafiero también hizo presencia, acompañado por trabajadores de la sede diplomática.