Las mesuras adoptadas por el gobierno de Panamá para afrontar la crisis energética que traería cortes programados de luz se mantendrán "hasta nuevo aviso" a pesar de las lluvias sentidas el domingo, informó el Gobierno, que a su vez giró la orden de mantener las clases.
"Si bien se han dado lluvias en algunos sectores del país, todavía no llueve sobre los embalses de las principales hidroeléctricas", de acuerdo al Estado panameño.
Por tanto, las medidas en prácticas desde inicios de semana "regirán hasta nuevo aviso" para "evitar cortes de energía y otras medidas más drásticas", de acuerdo al comunicado oficial.
Horas antes del aviso del ministro de la Presidencia, Roberto Henríquez, aseguró que las medidas que se tomaron "han sido positivas, desde el momento en que no hemos sometido al país a recortes de energía, porque eso si sería un problema para todos".
Henríquez manifestó que las principales hidroeléctricas del país están sin operar para esperar que el nivel de las aguas suban, por lo que se depende de pequeñas hidroeléctricas y de la generación térmica.
La ausencia de lluvias ha causado que los principales embalses del país, Bayano y Fortuna, mantegan niveles mínimos y las hidroeléctricas han sido imposibilitadas de generar la energía necesaria para atender la demanda en el país.
Por ello, el gobierno panameño hizo la prohibición de utilizar aires acondicionados en las oficinas gubernamentales y limitó su uso también, de ocho de la mañana a cuatro de la tarde, a comercios y empresas privadas.