La Comisión Europea ha recibido hoy una clara advertencia que destaca los peligros de importar carne paraguaya, parte de la cual procede de ganado criado en tierra habitada por indígenas aislados.
La semana pasada la carne de Paraguay recibió el visto bueno de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE, según sus siglas en inglés) después de un brote de fiebre aftosa. El nuevo estatus ante la OIE implica que los productos pueden ser exportados nuevamente a la Unión Europea tras dos años de veto.
Pero Survival International ha escrito a la Comisión Europea pidiéndole que evite la importación de productos cárnicos de Paraguay hasta que cese la tala del bosque de los ayoreo-totobiegosodes y el legítimo derecho de la tribu a sus tierras ancestrales sea respetado.
La firma ganadera de propiedad brasileña, Yaguarete Porá S.A., ha sido detectada deforestando el bosque ilegalmente para producción cárnica en el norte de Paraguay, donde se sabe que habitan miembros no contactados de los ayoreo-totobiegosodes.
Los indígenas dependen completamente del bosque para su supervivencia y cualquier contacto entre ellos y los ganaderos puede ser mortal.
Los indígenas no contactados carecen de inmunidad frente a las enfermedades traídas por los foráneos. La mayoría de los ayoreos que ya han sido contactados padecen de enfermedades crónicas, especialmente enfermedades respiratorias, y varios miembros de la tribu han fallecido recientemente.
En un esfuerzo por hacer un lavado de imagen, el director de Yaguarete Porá, Marcelo Bastos Ferraz, planea convertir parte de su territorio de cría ·en una reserva natural privada que, según afirma, podría funcionar como un “corredor de vida salvaje”. Pero el resto del bosque sería destruido para fines ganaderos. Los ayoreos llevan reclamando toda esa zona desde 1993.
Los indígenas ayoreos que han sido contactados previamente han descrito el terror que sintieron cuando se vieron obligados a huir por las topadoras (excavadoras) de los ganaderos que destruyen su tierra. Ahora temen por la vida de sus parientes que se esconden en la última “isla” de bosque que queda.
El director de Survival International, Stephen Corry, declaró el día de hoy: “Los ayoreos son los últimos indígenas no contactados que hay fuera de la Amazonia en América. Viven en una cada vez más reducida isla de bosque y su último refugio está siendo destruido ilegalmente. No creemos que los consumidores europeos quieran comer carne que provenga de donde una vez se erigió el bosque de los ayoreos”.