La prensa colombiana hizo la publicación afirmando que "un alto oficial de la marina rusa dijo que apoyarán a Nicaragua en una eventual guerra con Colombia", lo que trajo al Congreso de esa nación a comenzar una reunión para discutir sobre el tema.
El vicepresidente de la Comisión Quinta de la Cámara de Colombia, William García Tirado, hizo el pedido a la mesa directiva de comenzar una sesión reservada en la que esté presente la ministra de Relaciones Exteriores, María Angela Holguín, y al ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, para que brinden un informe sobre la nota de protesta enviada la semana pasada por la intervención ilegal de un avión ruso y en este momento, por ese reporte de una posible guerra.
"El país no puede quedarse con las manos cruzadas tras una amenaza directa contra la soberanía nacional, por ello hay que acudir a todas las instancias internacionales para sumar apoyos y tomar decisiones con la sabiduría que se requiere en estos casos", sostuvo el representante del partido colombiano Cambio Radical.
El Congreso colombiano hará varias preguntas a puertas cerradas al ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, para que hable de la capacidad militar del ejército colombiano ante una eventual confrontación armada con Nicaragua . En las preguntas, según Caracol Radio, los nicaragüenses tendrían el respaldo de Rusia, dijo la emisora Caracol Radio. Las preguntas fueron formuladas por el congresista colombiano William García Tirado , y, pareciera según las interrogantes , que ya se está al borde de la guerra entre las dos naciones latinoamericanas que presentan un panorama pasado de la guerra fría de enfrentamiento entre el Este y Oeste, cuando existía el bloque comunista soviético desaparecido en la década de los 90.
He aquí las preguntas que harán la próxima semana el diputado García y demás parlamentarios colombianos, según fuentes informativas internacionales, al ministro de defensa de Colombia para saber si el Ejército está preparado "para enfrentar una posible confrontación militar con Nicaragua" y en qué estado está tanto la flota aérea como la naval del país de producirse una "confrontación aérea o marítima con países de la región".
Asimismo, desean saber si las Fuerzas Militares cuentan con armamento para derribar desde tierra a "aeronaves invasoras de ejércitos extranjeros" y si la Marina "está en capacidad de derrotar la flota militar rusa que se encuentra en aguas latinoamericanas". Las preguntas, formuladas por el diputado William García Tirado, también se interesan por la protección que da actualmente el Estado a "las refinerías y aeropuertos de cualquier ataque aéreo extranjero" y por la protección de las instalaciones militares del país. Igualmente, los congresistas quieren saber si "Colombia tiene armamento que impida el bombardeo de nuestras ciudades o puntos estratégicos de defensa nacional".
Colombia y Nicaragua pasaron años en una disputa legal sobre derechos del mar en el Caribe que benefició a los nicaragüenses con la sentencia de la Corte Internacional de Justicia de La Haya del 19 de noviembre del 2012 ,pero que los colombianos no quieren reconocer a pesar que el fallo del máximo tribunal de la ONU es de ineludible cumplimiento.
La CIJ reconoció la soberanía colombiana sobre el archipiélago de San Andrés, pero al mismo tiempo otorgó por Derecho la posesión y dominio sobre 90 mil kilómetros a Nicaragua. El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, consideró que la decisión del alto tribunal sobre las aguas nicaragüenses era un "error" y defendió que el fallo "no es aplicable" porque, según la Carta Magna y la interpretación de la Corte Constitucional, cualquier modificación del territorio colombiano debe producirse a través de un tratado internacional ratificado por el Congreso. También argumentó que la decisión de la CIJ tampoco es aplicable porque "desconoce por completo los tratados internacionales suscritos por Colombia con Costa Rica, Panamá y Jamaica, que está obligado a cumplir".
Además, emitió un decreto para reafirmar la unidad de la plataforma continental y de la zona contigua del territorio continental e insular colombiano, lo que permitirá al país seguir ejerciendo sus derechos soberanos sobre una extensa área del mar Caribe Occidental. En cambio, el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega consideró que la decisión judicial es una "victoria nacional" y rechazó celebrar un tratado con Colombia, insistiendo en que el fallo de la CIJ es de aplicación directa y obligatorio cumplimiento.
En un paso más, el pasado septiembre, el gobierno nicaragüense anunció que el país centroamericano había presentado otra demanda en la CIJ para definir su territorio en el mar Caribe, pidiendo que declare "el rumbo exacto" de su frontera en la plataforma continental que se extiende más allá de los límites fijados por su fallo anterior sobre el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina. Por su parte, Santos no dudó en calificar de "inamistosa, improcedente e infundada" la nueva demanda presentada por Nicaragua y opinó que no tiene "ninguna posibilidad de éxito". En ese sentido, reiteró que "la plataforma continental colombiana va desde el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina hasta las costas de Cartagena, Barranquilla y Santa Marta".
Por otro lado, El inspector general del Ejército de Nicaragua, general de brigada Adolfo Zepeda, dijo ayer que la naval nicaragüense, con EE.UU. y Rusia por separado, han realizado operaciones antinarcóticos en los espacios marítimos delimitados por la Corte Internacional de Justicia (CIJ) con Colombia en el Caribe. "Nosotros tenemos acuerdo de cooperación para evitar el tráfico de ilícitos en el mar Caribe con los Estados Unidos y también coopera con nosotros el Servicio de Control de Drogas de la Federación de Rusia", dijo el jefe militar de Nicaragua a medios informativos. Reiteró que "como país soberano no tenemos que pedir permiso ni complacencia a ningún país para firmar esos convenios con los países que creamos convenientes y que, además, ellos quieran cooperar con nosotros en ese trabajo". El Parlamento de Nicaragua autorizó el 29 de noviembre del año pasado el ingreso de tropas, naves y aeronaves militares de Estados Unidos con el fin de realizar operaciones antinarcóticos conjuntas, particularmente "en los espacios marítimos delimitados" por la CIJ con Colombia en el mar Caribe.
El 19 de noviembre de 2012, la CIJ definió los límites en el Caribe entre Colombia y Nicaragua y dejó bajo soberanía colombiana siete cayos del archipiélago de San Andrés, cuyas islas mayores ya se habían concedido a Bogotá en 2007. También otorgó a Nicaragua una franja marina en esa zona que Colombia calcula en unos 75.000 kilómetros cuadrados y el país centroamericano en más de 90.000 kilómetros cuadrados. Mientras en abril pasado, la Fuerza Naval y el Servicio de Control de Drogas de la Federación Rusa se incautaron 100 paquetes de cocaína a 30 millas náuticas del cayo Quitasueño, en aguas del mar Caribe. Agregó que "no hay ninguna situación de conflicto o enfrentamiento bélico" con Colombia.
Nicaragua y Rusia tienen un convenio de lucha contra el narcotráfico y el 22 de marzo pasado el jefe antidrogas ruso, Víctor Ivanov, colocó al sur de las afueras de Managua la primera piedra para la construcción de un centro de entrenamiento de lucha antidrogas que preparará a agentes operativos para toda América Central.