BRUSELAS - Europa está con el riesgo del "shutdown", aunque, en contraste de Estados Unidos, no se tiene el peligro el funcionamiento y el salario de las instituciones y agencias comunitarias, pero en otro lado el pago de las facturas que empresas, universidades y entes locales han hecho del envío a Bruselas para que entregue el financiamiento prometido y aprobado.

La nueva alerta fue reactivada ayer, cuando la Conferencia de los presidentes (el organismo del Parlamento Europeo donde se sientan el titular del cuerpo, Martin Schulz y los presidentes de todos los grupos políticos), después del fracaso, anoche, de la última reunión de negociación con el Consejo, tomó la decisión de sacar del orden del día del plenario de la semana próxima la votación sobre el presupuesto plurianual (2014-2020).

Un sí es indispensable para dejar seguro el funcionamiento normal de todas las políticas comunitarias a partir de enero próximo. El enfrentamiento entre los gobiernos y el parlamento ocurre hace meses y no se limita sólo al presupuesto plurianual europeo. También están en danza los presupuestos 2013 y 2014.

Este último, en particular, tendrá que ser equilibrado por los 28 gobiernos mediante el desembolso de 3.900 millones de euros. El Consejo, aprobó el lunes pasado el pago provisoriamente, subordinando el presupuesto al sí del plenario y pretendiendo que, de los 3.900 millones, poco más de 400 fueran destinados al fondo de solidaridad contra las catástrofes naturales a favor de Alemania (que recibe la parte del león. con 360,5 millones) Austria y República Checa por las inundaciones de mayo y junio pasados y de Rumania, por la sequía y los incendios de 2012.

Esto causó una provocación inaceptable para el Parlamento, que estima el equilibrio del presupuesto 2013 como "precondición" indispensable para aceptar el presupuesto plurianual.

Y no sólo esto, porque el principal punto de controversia en el último capítulo del enfrentamiento se ha vuelto la "condicionalidad macroeconómica que los países "rigoristas", comenzando por Alemania, quieren introducir en el presupuesto a partir de 2014.

En la práctica, esos países piden que los fondos estructurales, aquellos para las regiones, no sean desembolsados si un estado no respeta los objetivos de déficit y reducción de deuda.

Otro punto ríspido es el controvertido pedido de los gobiernos de no anticipar a los primeros dos años del ejercicio (2014 y 2015), como se prometió en cambio en la cumbre de junio pasado, todos los recursos para la lucha contra la desocupación juvenil.

Así, el jefe de la bancada socialdemócrata, Hannes Swoboda, hablando de un Consejo "paralizado por su propia testarudez", advierte que "la propuesta de sancionar a las regiones con el retiro de los fondos si los gobiernos nacionales violan las reglas de presupuesto es absurda e inaceptable".

Y el enfrentamiento sigue, con el comisario de Presupuesto, Janusz Lewandowski, que advierte: si el presupuesto plurianual no pasa la semana que viene, en noviembre no habrá dinero para pagar los desembolsos de la política regional, el desarrollo rural y los compromisos internacionales de la UE.