» Las relaciones entre Merkel de Alemania y Barack Obama de EE.UU., serán bastantes distanciadas por este caso.
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BERLÍN – Aún sorprendido por el peor escándalo de espionaje desde la Guerra Fría, el gobierno de Alemania se mantiene con reacciones confundidas contra la administración estadounidense al haber interceptado el teléfono celular de la canciller alemana, Angela Merkel.
Todavía entre la ira y la vergüenza, el gobierno alemán se mantiene protestando por el espionaje al que se le practicó a Merkel, pero al mismo tiempo hace el intento para que el escándalo no afecte las relaciones con Estados Unidos, uno de sus aliados estratégicos.
El gobierno alemán además hace el intento de evitar que el episodio traiga consigo el antiamericanismo latente en una parte sustancial de la población germana.
Pero, tampoco Alemania tiene las condiciones de observar para otro lado y el 18 de noviembre una sesión especial del Bundestag (parlamento) para discutir el incómodo episodio que deterioraría las relaciones con Washington.
La oposición de izquierda de Linke y los Verdes aspiran a que durante esa sesión especial se conforme una comisión investigadora parlamentaria. Esa comisión tiene muchas posibilidades de conformarse ya que el PSD (socialdemócrata) está dispuesto a acompañar la propuesta y el partido CDU-CSU de Merkel adoptó una posición neutral, que de persistir favorecerá la aprobación de la comisión investigadora.
La oposición exige además la dimisión del ministro del Interior, Hans-Peter Friedrich, y del ministro de la Cancillería, Ronald Pofalla, que tienen consigo los cargos de los servicios técnicos y estratégicos que están alrededor de la canciller.
Incluso, la oposición ha pedido que Friedrich se presente a declarar en el Bundestag el 18 de noviembre y deslizó que pedirá la comparecencia de Edward Snowden, el "topo" del Datagate, aunque es improbable que abandone su exilio en Moscú. Sin embargo, muchos consideran que esa comisión investigadora tendrá un resultado inocuo, ya que la información recolectada por el espionaje de la agencia de inteligencia NSA de Estados Unidos está preservada en Washington y no será compartida con el gobierno alemán, por lo menos por ahora. En todo caso, la comisión podrá investigar si los servicios de inteligencia de Alemania han fracasado en proteger la información confidencial del gobierno y la canciller Merkel.
La certeza que ha surgido a través de los medios de comunicación, es que Merkel fue espiada por años por la NSA y que, presuntamente, el presidente Barack Obama se enteró recientemente.
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