EL CAIRO - Al menos 51 personas murieron el domingo en Egipto, dijeron fuentes de seguridad, cuando partidarios y opositores del derrocado presidente Mohamed Mursi se enfrentaron durante protestas callejeras en varias ciudades del país.
En una señal de posibles hechos de violencia en el corto plazo, una alianza que incluye a los Hermanos Musulmanes instó a los egipcios a protestar desde el martes y reunirse en la plaza Tahrir el viernes, diciendo: "Nadie nos detendrá de (concurrir a) Tahrir sin importar los sacrificios".
Violentos enfrentamientos ocurren casi a diario en Egipto desde que el Ejército derrocó a Mursi en julio tras masivas protestas en su contra.
El 14 de agosto, las autoridades destruyeron dos campamentos de protesta de partidarios de Mursi en El Cairo, dejando cientos de muertos, tras lo que declararon el estado de emergencia y se impuso un toque de queda. Muchos líderes de los Hermanos Musulmanes han sido arrestados desde entonces.
En el hospital Ibn Sina, en el distrito de Mohandiseen, en El Cairo, los periodistas miraron ocho cuerpos envueltos en sábanas azules y blancas en medio de charcos de sangre.
"El Ministerio del Interior y el Ejército mataron a mi hijo", gritaba Sabah el-Sayed, madre de Rami Imam, de 29 años. El padre dijo que Iman se dirigía hacia su casa desde el trabajo cuando quedó en medio de los enfrentamientos.
Abdelrahman al-Tantawi, el médico que trasladó a Imam al hospital, dijo que vio a la policía y al Ejército disparar desde un puente hacia los manifestantes partidarios de los Hermanos Musulmanes.
El médico dijo que Imam tenía una herida de bala en la espalda. Reuters no pudo verificar de manera independiente el relato de los hechos.
Las autoridades egipcias advirtieron el sábado de que cualquiera que protestase contra el Ejército sería considerado como un agente de potencias extranjeras y no como un activista. En la jornada se celebraba el aniversario de un ataque contra fuerzas israelíes durante la guerra de 1973.
El ministerio del Interior, que dijo que 423 personas fueron arrestadas, describió los enfrentamientos como un intento de los Hermanos Musulmanes de "arruinar las celebraciones y causar roces con las masas".
Según los medios, decenas resultaron heridas.
En una ceremonia el domingo, el jefe del Ejército, general Abdel Fattah al-Sisi, el hombre que derrocó a Mursi, dijo: "Hay mucha gente que piensa que el Ejército de Egipto puede ser derrotado. El Ejército egipcio es como una pirámide pero es una pirámide porque el pueblo de Egipto lo apoya".
Los manifestantes se habían dirigido a la plaza Tahrir, el centro de las protestas durante el levantamiento popular que derrocó al autócrata Hosni Mubarak en el 2011, dijeron fuentes de seguridad.
El Ejército a menudo acusa a los Hermanos Musulmanes de incitar la violencia durante las manifestaciones, hechos que la organización niega.
La agencia estatal de noticias reportó que durante los enfrentamientos en la provincia de Qulubiya, en el Delta del Nilo, las autoridades arrestaron a 25 miembros de los Hermanos Musulmanes que tenían 51 granadas de mano.
Los Hermanos Musulmanes sostienen que se oponen a los métodos de violencia de otros grupos islámicos. Los ataques de militantes a la policía y los soldados en la península del Sinaí han aumentado desde que Mursi fue derrocado.
En la ciudad de Delga, a 300 kilómetros al sur de la capital, un miembro de los Hermanos Musulmanes murió y al menos dos más resultaron heridos, dijeron fuentes médicas y de seguridad.
Las fuerzas de seguridad dispararon gases lacrimógenos en la capital y en Alejandría para dispersar a los manifestantes, dijeron testigos.
Miles de miembros de los Hermanos Musulmanes llegaron a cinco cuadras de la plaza Tahrir pero la policía los repelió con gas lacrimógeno y batones.