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El registro sanitario de un alimento es la garantía que acredita al empresario nicaragüense, que los productos que ofrece en el mercado nacional, son aptos para el consumo humano y con estándares de calidad, para la comercialización otorgada a un exportador, importador o distribuidor de un producto.
Adicionalmente, los distintos productos alimenticios que cuentan con registro sanitario y se ofrecen en el mercado nacional brindan al consumidor final la confianza y certeza que se trata de un producto de calidad. Y es de gran importancia para las PYME consolidar un producto apto para el consumo humano, habiendo realizado los análisis de laboratorio de inocuidad, químicos, biológicos o toxicológicos, correspondientes con las normas sanitarias vigentes y la presentación de los certificados sanitarios emitidos por el Ministerio de Salud.
Los productos ofrecidos en el mercado nacional deben estar sustentados en la satisfacción de las expectativas de sus clientes. En tal carácter, al tener clientes satisfechos, las PYME tienen la oportunidad de desarrollarse y obtener mayores beneficios tanto comerciales como económicos, permitiéndoles expandirse no solo dentro del territorio nacional, sino también ofreciendo la pauta para expandirse externamente creando así su propio crecimiento económico, el cual lo diferenciará del resto de los empresarios.
Un caso muy específico es el de un pequeño empresario productor de rosquillas, quien se limitaba a ofrecer sus productos localmente y quien facturaba alrededor de C$ 2,000 al mes; sin embargo, como parte de la ampliación de sus productos, empezó a promoverlos en el pacífico de Nicaragua en el año 2008.
Posteriormente, empezó a exportar dicho producto (rosquillas) hacia un mercado mucho más competitivo y exigente como lo es los Estados Unidos de América para luego también establecerse en Costa Rica, donde sus ventas en promedio en la actualidad son por el orden de los US$ 4,000 al mes.
Este empresario por su parte expresa que no quería entrar a nuevos mercados de forma artesanal, por lo que buscó nuevos métodos de calidad como lo son los empaques y los registros sanitarios, para aumentar sus ventas en Nicaragua y en el exterior.
En los empaques de sus productos, esta pequeña empresa ahora incluye su logotipo, el registro sanitario y la tabla nutricional de las rosquillas; con lo cual han logrado consolidarse y posesionarse no solo del mercado local sino también de mercados tan exigentes como lo son los Estados Unidos de América y Costa Rica.
En tal sentido, observemos la importancia que tiene para las PYME ese valor agregado a sus productos, con lo cual tendrían mayor oportunidad de ofrecer dichos productos a mejores costos al momento de la exportación, y lo mismo sucede con los consumidores promedios, pues lo asociarán a un origen empresarial, posicionándolo en el mercado local y abriéndose caminos hacia su crecimiento económico.
Siendo que en nuestro país, no se le ha dado la importancia debida, es importante hacer conciencia en nuestros empresarios ya sean pequeños, medianos o grandes, que el registro sanitario representa un activo intangible que aporta valor agregado al producto, brindándole al mismo tiempo, mayor competitividad en el mercado y haciendo más fácil el posicionamiento de la empresa y sus productos.
Una vez alcanzados estos logros, las PYME nicaragüenses obtendrán el reconocimiento de sus productos e incursionarán en el mercado local con mayor solidez, ampliando sus objetivos de mercado.
En resumen, el registro sanitario constituye una parte esencial para un mejor posicionamiento de dichos productos.