El Pdte. de Ecuador Rafael Correa, puso a temblar con sus advertencias, al magnate de las telecomunicaciones Carlos Slim, de cara a la revisión de las ganancias de Claro en Ecuador.
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El presidente de Ecuador, Rafael Correa, que en el pasado ordenó disminuir el margen de utilidades de las petroleras extranjeras con una polémica reforma, hizo un llamado ayer martes que se estará haciendo un estudio de las altas ganancias de las telefónicas Claro y Telefónica.
El gobernante de izquierda formuló el anuncio cuando se impulsa un proyecto de ley que aumenta la participación del Estado en las utilidades que otorgan las empresas de telefonía móvil a sus trabajadores.
La actual normativa aplica la obligación a las compañías Claro y Telefónica a distribuir un 15% de sus utilidades entre sus trabajadores. Correa estará haciendo maniobras para que el 12% de esos recursos sean transferidos al Estado para financiar obras públicas.
"¿Qué derecho es que 4.500 familias obtengan 130 millones (de dólares anuales) de utilidades en base al uso de un recurso natural de todos los ecuatorianos como es el espectro radioeléctrico?", criticó Correa durante una entrevista en la ciudad costera de Esmeraldas (noroeste).
En ese sentido, agregó: "eso significa que las telefónicas están ganando mucho más. No se preocupen. Ya vamos a eso".
El sábado el mandatario hizo el adelanto que negociará con las telefónicas la concesión del espectro 4G, buscando la "mayor renta" para el Estado.
Claro, del magnate mexicano Carlos Slim, tiene el control del 67% del mercado de la telefonía móvil en Ecuador, mientras que la española Telefónica (que opera bajo la marca Movistar) maneja un 30% y la estatal ecuatoriana CNT, un 2,5%.
Por su parte, la Asociación de Empresas de Telecomunicaciones de Ecuador calificó de "inconstitucional" la iniciativa sobre el reparto de utilidades, que tendrá que ser aprobada en los próximos días por el Congreso de mayoría oficialista.
El director del gremio, Roberto Aspiazu, explicó que la Constitución prevé que "excepcionalmente se puede legislar" sobre los sectores que explotan recursos naturales no renovables como el petróleo, pero no concede tal atribución en el caso del espectro radioeléctrico.
Se pretende "de alguna manera igualarlo con legislación precedente que ya se ha establecido para el caso de los sectores de minería y de petróleos", manifestó.
En 2007, Correa redujo de 50% a 1% las ganancias extraordinarias que recibían las petroleras por el aumento intempestivo de los precios en el mercado, y luego hizo cambios en sus contratos de operación.
