El delito es común afirma fiscal Ana Julia Guido y fue tipificado de conspiración, proposición para la ejecución del delito y crimen organizado
En la audiencia preliminar, el juez resolvió mantener la prisión preventiva para los acusados.
Foto tomada de La Prensa
El Ministerio Público acusó ayer a Juan José , Gregorio Torres Espinoza y a Erick Salgado González por los disparos realizados en el sector de Darío en el norte de Nicaragua, a una caravana de simpatizantes del FSLN que regresaban a sus lugares de orígenes, luego de participar en las celebraciones políticas de los 35 años de la revolución sandinista, que derrotó a la dictadura de la familia Somoza . Los detenidos se encargaron de tirar piedras a los buses que transportaban manifestantes sandinistas el “19 de julio” luego de los actos oficiales en la plaza Juan Pablo II de Managua, la capital de Nicaragua.
La acusación fue admitida por el Juez suplente del distrito penal de audiencia de Matagalpa, Wilford Ramsés Bustamante Rocha y la audiencia fue transmitida por la televisión estatal canal 6 . La acción violenta dejó 5 muertos y 19 heridos. El juez suplente del distrito penal de audiencias de Matagalpa, Wilford Ramsés Bustamante Rocha, fijó para el 4 de agosto el inicio de la audiencia contra las tres personas que fueron acusadas por supuesta conspiración, proposición para la ejecución del delito y crimen organizado.
En la audiencia preliminar, el juez resolvió mantener la prisión preventiva para los acusados. La versión policial señala y sirve de base a la Fiscalía, que el ataque contra los simpatizantes sandinistas fue cometido por un grupo de delincuentes comunes a quienes, uno o varios desconocidos, les prometieron una paga por ello.
La Policía Nacional detuvo a once personas como sospechosas de esos hechos, incluyendo a los tres acusados. Cinco de ellas fueron dejadas en libertad por falta de pruebas y a otras tres las continúan investigando. La fiscal general de Nicaragua, Ana Julia Guido, dijo a periodistas antes de la audiencia preliminar que es un delito común y que lo probarán en el juicio.
Guido sostuvo que los acusados retrasaron la caravana al lanzar piedras a los autobuses que movilizaban a los sandinistas para que en otro punto, a unos 600 metros de distancia, otro grupo disparará con armas de fuego.
"Estas tres personas las acusamos por los delitos de conspiración, proposición en la comisión de los delitos y asociación al crimen organizado", dijo a medios televisivos del gobierno la fiscal general Ana Guido. Los acusados "tenían la labor de contener la caravana (..) lanzando piedras", dijo Guido, sin precisar el lugar desde donde los hombres cometieron la acción.
Expresó que ellos aceptaron participar en la acción a cambio de dinero y hay "pruebas de que ellos estuvieron en el lugar de los hechos" y que aceptaron participar en la acción a cambio dinero. Según la fiscal, también existen evidencias de que los sospechosos se reunieron el 16 de julio en su comarca y al día siguiente viajaron al municipio de Tipitapa, departamento de Managua, para reunirse con el desconocido que los contrató, según se supo.
Las pesquisas continuarán abiertas hasta que las autoridades identifiquen a los atacantes que, según la Policía, constituyen "dos grupos de asesinos" de origen desconocido. Guido dijo que este jueves fueron liberadas cuatro de las otras siete personas que estaban detenidas bajo investigación, porque no pudieron ser vinculados con el crimen.
Familiares de los tres acusados afirmaron ante un organismo de derechos humanos que los detenidos son simpatizantes del gobernante Frente Sandinista (FSLN, izquierda) y que el día del ataque regresaban a sus casas en uno de los autobuses de la caravana. Ni la Policía ni la Fiscalía se han referido a esa versión.