En las votaciones de ayer más del 80% respalda la separación de Cataluña de España.
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El presidente de la Generalitat, Artur Mas, consiguió la influencia que quería con una votación no oficial con respecto a la independencia de Cataluña de España.
Las filas en los centros electorales, la deserción de incidentes y las urnas topadas con más de dos millones de votos hicieron que la Generalitat lograra un “éxito total” la jornada del 9-N, a pesar a la suspensión del Tribunal Constitucional que esta sobre ella. El resultado obtenido logró al presidente de la Generalitat recuperar la iniciativa política frente a Esquerra Republicana y lanzar a Mariano Rajoy la petición de comenzar a negociar una “consulta definitiva” sobre el estatus de Cataluña de la nación española.
A pesar de la ausencia de garantías legales sobre la consulta y las llamadas al boicoteo de PP, Ciutadans y UPyD, los catalanes respondieron al llamamiento de la Generalitat y de los partidos soberanistas.
A medianoche se calcularon 2,04 millones de votantes y los responsables de la votación miran que la cifra definitiva llegara a los 2.25 millones. Con datos provisionales iba por encima un 80,7% el doble sí —apoyo a que Cataluña se convierta en un Estado y que éste se convierta en independiente—. El 10,1% votó sí a la primera pregunta y no a la segunda, mientras que el 4,5% dijo no a que Cataluña sea un Estado.