Timothy Ray Brown.
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El único caso que fue cien por ciento confirmado de curación definitiva del sida, el del conocido 'paciente de Berlín', vendría su única explicación el tratamiento de leucemia que este tenía. Esta conclusión la logró una reciente investigación de patólogos de EE.UU.
Timothy Ray Brown es el hombre al que, mientras se encontraba recibiendo medicación contra el sida en un centro clínico de la capital alemana, le diagnosticaron cáncer. En 2007 los médicos le hicieron un trasplante de la médula ósea y el tratamiento tuvo efecto tanto sobre la enfermedad oncológica como sobre el virus de la inmunodeficiencia humana.
El VIH comenzó a remitir para despues desaparecer de la sangre del paciente alemán por completo, aunque en esos momentos no estaba tomando medicamentos antirretrovirales. Ninguna de las pruebas que le han practicado posteriormente ha notificado nunca más la presencia de este organismo patógeno en el cuerpo.
Una serie de experimentos con monos de laboratorio hecha en la Universidad Emory (Atlanta, EE.UU.) en los recientes años evidencia el papel clave de una mutación genética que tenía el donante de la médula ósea que le trasplantaron a Brown. Desde el inicio esa fue una de las tres hipótesis que sopesaron el doctor Guido Silvestri y su equipo, dice la revista digital 'Live Science'.
La rara mutación, que se conoce como 'delta 32' y descubierta en el donante ya después de la operación, es la que hace que los linfocitos de una persona afectada del sida sean resistentes al virus. Mientras, precisamente estas células inmunitarias son el principal objetivo del VIH en el organismo humano.