Según análisis de la Dra. Fátima del Socorro Rosales González, Juez Treceavo de Distrito Penal de Juicio de Managua, la resistencia a la delincuencia generalmente termina mal.
En la foto la Dra. Fátima del Socorro Rosales González, juez treceavo de distrito penal de juicio de Managua.
Foto Los delitos de robo agravado y robo con violencia o intimidación están convirtiéndose con mayor frecuencia en ilícitos contra la vida y la seguridad física de las personas, advierte la doctora Fátima del Socorro Rosales González, Jueza Treceavo de Distrito Penal de Juicio de Managua, según un análisis realizado por la judicial de las estadísticas de esta judicatura en el año 2014.
“El robo agravado o con violencia tienen la tendencia a convertirse en delitos de lesiones graves y en homicidios o asesinatos, cuando el delincuente encuentra oposición de la víctima o cuando la acción es frustrada”, explicó la doctora Rosales González.
La judicial precisó que el robo se convierte en delitos contra la vida o integridad física muchas veces cuando la víctima se resiste y el victimario utilizando armas de fuego (principalmente) o corto punzantes, ejecuta el delito que a veces lamentablemente desencadena en muerte.
La doctora Rosales Gózales explicó que existen dos circunstancias en las que ocurre este fenómeno, la primera cuando “la persona se resiste a entregar las pertenencias y el delincuente se pone nervioso y dispara ocasionando en la víctima lesiones graves e incluso la muerte”.
La otra circunstancia de este fenómeno vinculado a delitos contra el patrimonio, ocurre cuando “los victimarios al momento de ejecutar el ilícito, primero disparan a las personas para intimidar, pero no logran robarles debido a que la población acude en auxilio de las víctimas”.
Motos y armas
En ambos casos el instrumento más utilizado para cometer los ilícitos han sido armas de fuego cortas, como revólver o pistolas, “ya que esta permite al delincuente no tener riesgo y salir ileso, pero también utilizan armas corto punzantes”.
El modus operandi en estos delitos (robo seguido de lesiones o muerte) que a criterio de la jueza tuvieron un repunte en el 2014, generalmente se realiza en motocicletas. ”Siempre andan dos personas en una moto, pero en robos grandes se unen varios motociclistas”, dijo la judicial, que también ha sido víctima en tres ocasiones de robo.
El proceso judicial contra los actores de estos delitos, sostuvo la jueza capitalina, finaliza con fallos de culpabilidad por ambos ilícitos, ya que “estamos frente a un concurso real de delitos, donde priva la autonomía de cada acción delictiva, es decir se condena por cada delito”.
En el Juzgado Treceavo de Distrito Penal de Juicio de Managua, durante el año 2014, ingresaron un total de 248 causas, siendo el delito predominante el robo agravado, robo con violencia, lesiones graves, homicidio, asesinatos y tráfico de drogas.
El año pasado esta judicatura dictó 414 sentencias, lo que le valió un reconocimiento público en el Séptimo Taller de Evaluación del Modelo de Gestión de Despacho Judiciales de Managua.
La doctora Rosales Gózales finalizó diciendo que “continuamos al día con los usuarios dictando los fallos y sentencias conforme a lo establecido en la ley. No tenemos mora judicial, estamos dando a la población acceso efectivo a la justicia dando soluciones sin dilaciones”.
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