El presidente de Apen, Enrique Zamora manifestó que el nuevo modelo dará a los productores varias opciones, para protegerse de la variabilidad de los precios y reducir los costos de transacción.Foto Más de 3,200 pequeños y medianos productores de diferentes sectores como Café, Arroz, Sorgo, Maíz, Lácteos y Ganado fueron beneficiados con las nuevas herramientas de gestión de riesgos de precios mediante el proyecto “Reducción de vulnerabilidad del pequeño agricultor al riesgo de precios”, bajo la plataforma electrónica de comercialización de productos.
El presidente de la Asociación de Productores y Exportadores de Nicaragua (Apen), Enrique Zamora manifestó que este proyecto de cobertura de riesgos de precios a negociarse en línea es una realidad en el país, en donde esto conlleva a proteger a los productores en la volatilidad de los precios internacionales de los productos.
Este nuevo modelo de comercialización es segura, ya que facilitará a los productores un abanico de opciones para protegerse de la variabilidad de los precios y reducir los costos de transacción, con el uso de las nuevas tecnologías de comunicación, para así negociar los productos con una buena herramienta de cobertura de precios y con registros de operaciones de compra y venta de la bolsa a través de esta plataforma, indicó Zamora.
Por su parte el gerente general de la Bolsa Agropecuaria de Nicaragua (Bagsa), Luis Arévalo expresó que se inició desde el año 2013 y finaliza este 2016, donde las herramientas utilizadas para proteger a los pequeños productores, fueron la implementación de una plataforma en línea electrónica para comercialización de productos, capacitación para usarlas, equipamiento tecnológico y acreditación de un laboratorio, en el caso de los productores lácteos.
Con estas herramientas de cobertura de precios, el productor tendrá a su disposición contratos de venta a futuros, en donde podrá garantizar la estabilidad en el precio de productos que venderá y un impacto positivo en su flujo de ingresos, facilitándose así el acceso al financiamiento para la planificación de sus inversiones productivas, enfatizó el funcionario.
El proyecto fue ejecutado con el financiamiento del Fondo de Desarrollo Social Japonés, a través del Banco Mundial, con un monto de un millón de dólares, e implementado con la contraparte técnica de BAGSA.
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