Lizandra Norisell Rodríguez González fue la nueva víctima a manos de un doctor del Hospital Salud Integral.
Foto Otro caos envuelve la vida pública nuevamente cuando durante el viernes de la semana pasada, explotó la noticia de otra víctima mortal en los hospitales de Nicaragua, esta vez fue de un privado.
A pesar del dolor de la familia de Lizandra Norisell Rodríguez González, la madre de ella Sandra González, denunció a través de los medios de prensa que ni en el hospital se sabe dónde está el expediente clínico de su hija, que señala que la difunta muere tras dos infartos durante una cirugía estética.
“Cuando llegó Medicina Legal a retirar el cadáver no encontraron el expediente (clínico); no estaba el médico que la operó ni tampoco la directora del hospital”, lamentó la madre.
Los familiares no conocen todavía la hora exacta que muere Rodríguez González, ni del tiempo que se dilató la operación de estética, en el Hospital Salud Integral de Managua a manos del cirujano plástico David Páramo.
“Yo le dije a mi hija que tuviera cuidado porque ya había escuchado en los medios de comunicación de ese médico, lo habían llevado a los Juzgados por otros casos de pacientes operados por él”, dijo durante la entrevistada.
El médico redactó a través de su página de Facebook -que fue cerrada- “ya había terminado la cirugía cuando a la paciente la pasaban a la camilla para llevarla a recuperación hizo un paro (cardíaco), es una desgracia quirúrgica, no una negligencia, mucho menos un asesinato”.
La conocían por cuidar su salud
Los conocidos de Rodríguez González la tienen en mente como una mujer emprendedora y que siempre miraba de cerca su salud, tenía buenas prácticas de salud y realizaba bastantes ejercicios.
Léster Rodríguez, esposo de Lizandra Norisell, manifestó “le pagué (a Páramo) por un sueño, no para que la matara”.
La cirugía a la que se sometió la joven, explicó el marido, era una lipoescultura de glúteos donde pagó hasta US$3,000, que consiste en erradicar los depósitos de grasa entre la piel y los músculos del cuerpo, siendo la segunda de mayor demanda.
El jefe del Distrito II de Policía, comisionado Edgard Leiva Arauz, manifestó a través de un subcomisionado que se encuentra abierta una investigación por la muerte de la joven.
Artículos similares