En la gráfica la Comisionada Mayor Vilma Rosa González, Jefa de la División de Relaciones Públicas de la Policía Nacional.
Foto el19digital.com Otro policía ha muerto en Nicaragua. Se trata del voluntario Anastasio Alegría Espinoza, quien perdió fallece a manos de un grupo de delincuentes que se dedicaban a la producción y distribución de marihuana.
El hecho ocurre durante un tiroteo contra los narcotraficantes en esa zona norte del país, y la batalla ocurrió en una casa de la comunidad rural Los Laurales, en el municipio de San José de Bocay, en Jinotega, a 239 kilómetros al norte de Managua
A las 6:45 de la mañana en la comunidad Los Laureles, una patrulla allanó una vivienda, “siendo recibidos a disparos por los delincuentes Samuel Llorente Fajardo, Zayda Luna y Nelson Llorente Luna”, explica el comunicado policial.
Tras los disparos muere el policía voluntario. Tras los ataques los agentes enviaron su respuesta a la agresión resultando lesionados Nelson Llorente Luna y Zayda Luna.
En el lugar se ocuparon 100 libras de marihuana, 2 fusiles calibre 22, 2 escopetas, 2 pistolas y armamento militar.
En el comunicado la Policía Nacional detalla que el delincuente Samuel Llorente pertenece al grupo delincuencial que se conoce como “Julio Castellón”, que se dedica al cultivo y trasiego de marihuana.
Durante el mes de febrero pasado, en el Cuá Bocay, a 21 kilómetros de distancia, otro policía muere en un intercambio de disparos con delincuentes que todavía no han sido capturados ni identificados.
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