Esta semana recién pasada, escribí una carta al Vicepresidente de la Asamblea Legislativa de El Salvador, Othon Sigfrido Reyes, quien representa al FMLN y por cierto, tiene aspiraciones presidenciales para 2014 y asumirá como Presidente de la asamblea legislativa por acuerdo político con otros partidos, en un año.
El motivo de la carta fue con razón a una declaración pública hecha por el jefe de la fracción legislativa del FMLN y secretario general del partido, Medardo González, en la que aprueba un gasto de ochocientos mil dólares para la compra de autos nuevos para los directivos de dicho órgano del estado, en el que figura el diputado Sigfrido Reyes, así como, otros miembros de su partido.
Considero que, en un momento de crisis económica mundial a la que los latinoamericanos en todo el mundo nos vemos sujetos, y en el que la austeridad de los fondos públicos en nuestros países de origen debería ser una prioridad, actitudes como este gasto en vehículos nuevos para los directivos legislativos de un país tan pobre como lo es El Salvador, es inmoral,
Cientos de miles de niños han iniciado un año escolar esta semana en El Salvador, careciendo de recursos básicos, como uniforme, útiles escolares y alimentación para desarrollarse apropiadamente en un salón de clase. El Presidente de la República, Mauricio Funes, falló en su promesa de entregar a tiempo, uniformes, útiles escolares y zapatos, que prometió hace más de siete meses durante su toma de posesión.
En la carta que me refiero, le expreso al diputado Sigfrido Reyes que, solicito de su anuencia como líder de un partido que históricamente se ha identificado como el representante de los ciudadanos sin voz e ignorados, para que con su fracción política detenga ese despilfarro de dinero en autos y que mejor se canalice para alimentar a miles de niños de las escuelas públicas en los municipios más pobres del país.
En mi Facebook y blog Voz de la Diáspora en www.diasporasalvadorena.blogspot.com, solicité apoyo para respaldar mi carta firmándola y hasta este día, más de 400 personas de diferentes partes del país y el exterior la han firmado, la lista esta publicada en mi blog, además, solicité que llamaran a la oficina de Reyes, al 503-2281-2714 con el propósito de apoyar la iniciativa y obtener una respuesta a la solicitud. La respuesta una semana después de haber enviado la carta es, silencio.
Con el emblema de representar los intereses del pueblo sin voz e ignorado, los políticos latinoamericanos de tendencia socialista, han ganado apoyo de los pobres del continente, para realizar cambios profundos en las estructuras políticas de los círculos de poder histórico, que por dos siglos restringieron los ideales de igualdad social, progreso económico y libertad que la mayoría de ciudadanos del continente demandaba.
Pero, ¿Han sido estos círculos rotos para beneficiar al pueblo o para crear nuevos círculos oligárquicos de socialistas enmascarados de la hipocresía revolucionaria del siglo XXI?
En el caso de El Salvador, el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional – FMLN, es la primera fuerza política del país. Pero, ¿Ahora que el FMLN gobierna desde el poder ejecutivo y el legislativo, parece haber olvidado ese principio histórico de representar a los sin voz, que produjo la muerte de setenta y cinco mil héroes?
Sigfrido Reyes y la Comisión Política del FMLN han decidido esconderse e ignorar al pueblo que les exige que alimenten a los niños y dejen de usar el dinero del pueblo en lujos que el país no puede pagar. Con esta acción, el partido que supone ser un ejemplo del socialismo idóneo en el continente traiciona al pueblo que ha tenido esperanza en presenciar un cambio en la estructura y costumbres de la clase política opresora.
Al amanecer de la nueva década, la democracia latinoamericana despierta muy debilitada en Centroamérica, debido, a la corrupción política que embarga a una región liderada por socialistas en Guatemala, Honduras, El Salvador y Nicaragua.
El presidente Funes, además, protagoniza en este momento un episodio político que deja mucho que desear, al otorgar - sin licitación pública – un contrato multimillonario de publicidad a una empresa brasileña de nombre Polistepeque, la cual le pertenece a su amigo, quien solo tuvo que invertir dos mil dólares para ganar millones. Funes aduce que en el país no existe una sola empresa que tenga la calidad y experiencia para solventar sus necesidades de imagen pública. Señor Presidente, con todo respeto, pero eso es corrupción, nepotismo y además, un insulto al pueblo salvadoreño, lo animo a que reconsidere esta acción por el bienestar del pobre sin voz e ignorado que usted representa.
El telón negro de la primera década del siglo se ha cerrado, dejando a los pueblos más pobres de Latinoamérica con pocas razones para celebrar con entusiasmo los retóricos discursos triunfalistas de políticos que auguran - como lo han hecho por dos siglos otros - un futuro brillante para el continente.
El FMLN es instrumento del nuevo poder económico y político que se fortifica alrededor de los ex comandantes y que traiciona al pueblo sin voz. Diputado Sigfrido Reyes, usted ha ignorado al pueblo, le demuestra su verdadera cara política. Contestarnos no debería ser un privilegio para nosotros, ya que como servidor público, es su obligación. No se moleste más en contestarnos, la respuesta ha sido fuerte, clara y contundente.
Animo a los lectores a que continúen apoyando la iniciativa y que llamen a la oficina del diputado Reyes o que incluyan su nombre en la carta mandándome un correo a waltermonge@comisioncivicademocratica.org. Hagamos patria, hemos sido ignorados pero si tenemos voz, defendamos los intereses de nuestros niños, quienes se merecen un mejor porvenir. Bendiciones.