La región autónoma más rica de España, Cataluña, no puede afrontar la deuda pública, ni reducir el déficit. Por eso, pidió a Madrid medidas que oxigenen la economía regional, lo que disparó aún más la prima de riesgo española. ¿La creación de hispanobonos es una solución o es el comienzo de la caída de España a un abismo similar al de Grecia?
Los vencimientos de la deuda que Cataluña mantiene con el Estado español no pueden ser saldados por falta de liquidez, lo que evidencia que la crisis española ha alcanzado un nivel inédito y peligroso.
La región autónoma más rica del país no sólo no tiene cómo pagar la deuda pública, sino que además no puede acceder a los mercados de crédito y por lo tanto no logra cancelar los préstamos otorgados por Madrid en 2008 y 2009, luego del estallido de la burbuja inmobiliaria.
El año pasado ya se vislumbraban los problemas en Cataluña, ya que el déficit presupuestario se debería haber reducido hasta el 1,3% del PIB. Sin embargo, el gobierno no lo logró y acabó siendo del 2,66%, lo que produjo que las agencias de calificación crediticia llevaran la nota de la región al nivel más bajo.
Pedido de auxilio
El presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, pidió al gobierno de Mariano Rajoy que emitiera hispanobonos para poder afrontar los pagos. Asimismo, este año Cataluña debe refinanciar una deuda de 13.000 millones de euros, pero cabe destacar los intereses sobre los préstamos catalanes se han duplicado en 2 años.
"No nos importa cómo lo hagan, pero necesitamos pagar a fin de mes. Una economía no se recupera si no puede pagar sus deudas", rogó el presidente de Cataluña.
Además, el gobierno catalán pidió que el costo de los títulos sea homogéneo, es decir que sea promedio al europeo o bien al costo promedio español.
Por su parte, Rajoy aseguró que no dejará caer a Cataluña, porque eso significaría la quiebra de España, pero a cambio que cumpla con el objetivo del déficit.
Además, el presidente lanzó una señal a las regiones, ya que aseguró: “me considero responsable de lo que pase en las autonomías gobierne quien gobierne".
Pero Rajoy al principio se negó a emitir bonos, tal como actúa el gobierno alemán con el resto de los países europeos, sin embargo se está negociando una emisión para las regiones que hagan los mayores esfuerzos para reducir el déficit.
La solicitud de Mas empeoró la situación financiera de España, dado que la prima de riesgo se disparó al récord de más de 500 puntos básicos sobre el bono alemán.
Un sistema comparable
El sistema de autonomías de España funciona de manera similar al de la Unión Europea.
España no ha logrado reducir el déficit que le impone Alemania y los mercados. El déficit en 2011 alcanzó el 8,9% del PBI, mientras que en 2013 el objetivo fijado por Bruselas impone no superar el 3 por ciento.
A su vez, Madrid acusa a las autonomías de ser la causa de haber superado el techo de déficit el año pasado, con el 2,94 en 2011, y les exige que recorten sus déficits para este año y lo lleven al 1,5 por ciento.
La moneda de cambio que Madrid le brinda a Cataluña para acceder a la emisión de bonos que van a permitir los pagos de la deuda de la región a corto plazo, es que realice un ajuste presupuestario mayor.
La crisis de la burbuja inmobiliaria que explotó en 2008 redujo drásticamente los ingresos fiscales de las regiones.
Las autonomías no sólo se han endeudado sino que a tasas muy altas por el riesgo de caer en cesación de pagos. Este problema, que no sólo debe enfrentar Cataluña se da en todo el país, pero el peso de esa región podría arrastrar a toda la economía española.
Sin embargo, a pesar de las promesas de Rajoy, Madrid continuó presionando a las autonomías, ya que días atrás, el gobierno central aprobó un plan de ahorro de 18.349 millones de euros para 16 de las 17 comunidades autónomas.
El gobierno español negó que Cataluña se encuentre en quiebra y también rechazó la ayuda exterior para inyectar liquidez en los bancos. El rescate de Bankia, el tercer banco del país hizo sonar las alarmas en la Unión Europea, ya que se teme que España pueda seguir el mismo destino que Grecia.
Pero por ahora Madrid intenta calmar a los mercados, presionando a las autonomías y realizando ajustes al gasto público. Sin embargo, este sistema no se puede sostener en el tiempo, ya que además del deterioro social, la quiebra de alguna de las regiones crearía un efecto contagio en toda España, y más aun si se trata de Cataluña.