La mitad de las personas sin hogar habían perdido antes su trabajo. La mayor parte de estas personas -un 80%- son hombres, ya que a pesar de la feminización de la pobreza y la exclusión social, la mayoría de 'sin techo' son hombres y son ellos también los que tienden a usar en mayor medida estos recursos. La encuesta a las personas sin hogar que hoy publica el Instituto Nacional de Estadística se basa en las respuesta de este colectivo.
El 57,7% tiene menos de 45 años y el 38,4% entre 45 y 64 años, mientras que los mayores de 64 años representan el 3,9%. La edad media de estas personas se sitúa en 42,7 años.
¿Por qué se quedan sin hogar? Los principales motivos que dan las personas que se encuentran en esta situación son la pérdida del trabajo (el 45%), no poder hacer frente al pago del alojamiento (el 26%) y la separación de su pareja (el 20,9%).
La mitad de las personas sin hogar tienen hijos. Las situaciones familiares más frecuentes que han vivido estas personas hasta que cumplieron 18 años son la falta de dinero y el fallecimiento de algún miembro de la unidad familiar.
Casi la mitad de las personas sin hogar son extranjeras (45,8%). La mayoría de los extranjeros sin hogar son africanos -un 56,6%-, seguidos de los europeos -un 22,3%- y de los americanos -un 15,2%-. Algo más de la mitad de este colectivo sin hogar lleva más de cinco años en España.
Entre los extranjeros sin hogar, hay más jóvenes. El 78,6% tienen menos de 45 años. En el caso de los españoles, los jóvenes representan el 40,2% de las personas sin hogar.
Cataluña, Madrid y Andalucía acumulan los mayores niveles de población sin hogar. En el lado opuesto, La Rioja, Cantabria y Navarra registran los niveles más bajos de personas que no tienen casa.
La mayor parte de las personas sin hogar llevan ya más de tres años sin un alojamiento propio, concretamente el 44,5%. El 23,6% lleva entre uno y tres años sin hogar, y el 21,9%, llevan menos de un año. Es decir, un tercio se ha quedado sin hogar en el último año.
Casi el 90% de estas personas pernocta todas las noches en el mismo lugar. El 43,9% ha dormido en alojamientos colectivos y otro 20,8% lo ha hecho en pisos o pensiones facilitadas por alguna ONG u organismo. El 35% restante se ha alojado al margen de la red asistencial existente, bien sea en espacios públicos o pisos ocupados, entre otros.
¿Qué estudios tienen? El 60% ha alcanzó la educación secundaria, el 22% los estudios primarios y el 11,8%, estudios superiores. Sólo el 5,7% se declara sin estudios. En cuanto a la situación laboral, un 77,8% dice no tener empleo ni estar jubilado o incapacitado para trabajar.
Las principales fuentes de ingresos de la población sin hogar son las prestaciones públicas, como la renta mínima de inserción, las prestaciones por desempleo, o las pensiones contributivas y no contributivas. El dinero que les da la gente por la calle, y los amigos y conocidos son también fuente de ingresos, aunque en menor medida.