El domingo el presidente venezolano perdió raspadamente el referendo en el cual él quería lograr la posibilidad de poder ser indefinidamente re-electo así como introducir un programa más social. La oposición venezolana tras sufrir diez derrotas electorales consecutivas sentirá ello como un aliciente para revitalizarse y minar a quien tildan del aprendiz de Fidel.
Esta derrota no saca a Chávez del poder ni le quita parlamentarios o municipios, sin embargo le impide su pretensión de ser el único mandatario americano en poder ser re-electo y, lo que es más importante, muestra la primera victoria en las urnas de sus contrincantes.
Lo acontecido será festejado por Bush, el rey de España, Uribe y García, a quien el gobernante de Miraflores tanto atacó. La derecha en Venezuela, Bolivia, Ecuador y Nicaragua buscará sacar fuerzas para socavar a los gobiernos ‘bolivarianos’.
En el caso de Venezuela es posible que irrumpan fuerzas que digan que la mejor manera de ‘defender y profundizar la revolución’ es logrando una dirección más colectiva y rotatoria.
Domingo negro para el alcalde de Londres
Este referendo también repercutirá sobre Londres, pues su alcalde Ken Livingstone es la principal figura occidental que apoya totalmente a Chávez. En esta urbe, igualmente, hay miles de avisos con el emblema del gobierno bolivariano mostrándose como benefactores para que todas las personas con discapacidades o por ser padres o madres solteros y a tiempo completo paguen hasta la cuarta parte de lo que cuesta un pasaje de bus.
Para Livingstone ayer ha sido un día terrible. No sólo por lo de Venezuela sino porque se han revelado unas encuestas donde el laborismo cae a su nivel más bajo en 20 años.
En dos meses los conservadores han pasado a estar diez u once puntos por debajo del laborismo y hoy han invertido dicha relación. Si esta tendencia continúa los laboristas podrían sufrir una catástrofe en las elecciones municipales de Mayo y Ken podría perder la alcaldía.
Livingstone tiene la característica que él se convirtió en el primer alcalde que haya tenido la capital británica en el 2000 pero postulándose como un independiente y en contra de Blair, quien estaba en su apogeo. El ha auspiciado la mayor marcha anti-guerra de su país y posiblemente del mundo.
En los últimos años él ha buscado congraciarse con la maquinaria del nuevo laborismo que le expulsó del partido. Tras retornar a su antigua organización él se ha esforzado en llevarse bien con Brown.
Sin embargo, su cercanía a este gobierno que ve como se desploma su popularidad es algo que le afecta.
Si Ken busca la re-elección él debe intentar una forma de recuperar su independencia. El podría hacerlo acercándose a la prédica de los conservadores y ‘moderarse’ (un indicativo de ello es su tenaz defensa del jefe policial Ian Blair acusado de negligencia en el asesinato del sudamericano Jean Charles de Menezes) o buscar alguna postura radical. Anteriormente él ha planteado amnistiar a los irregulares, tal medida sería bien recibida por más de la mitad de la población de Londres que es por nacimiento o padres proveniente de otros países.
Sin embargo, el crecimiento de los tories y la derrota chavista podría obligar a Ken a tratar de apaciguar su mensaje y centrarse en la defensa de las obras que él ha hecho (desde haber conseguido que Londres sea sede olímpica hasta las mejoras en el transporte urbano).
Referendo Venezolano
Chávez y Putin
Venezuela tuvo un referendo para modificar su constitución y Rusia eligió a su parlamento. Chávez y Putin son nacionalistas que se benefician del boom petrolero y han chocado con Washington. Putin obtuvo más del 60% del parlamento ruso pero él constitucionalmente no puede ir a un tercer mandato en el 2008, aunque quiere aprovechar su triunfo para buscar alguna forma de quedarse como el líder del país. Chávez tuvo su primera derrota electoral tras diez comicios donde siempre venció. Ello evitará re-elegirse indefinidamente.
Washington desplegará una respuesta distinta para cada uno de esos casos. Ante Rusia Bush buscará evitar ir hacia una nueva guerra fría pero querrá presionarle para que se ’liberalice’ y deje de coquetear tanto con Irán. El sabe que Putin está impulsando el mercado y que los comunistas son sus principales rivales.
En cambio, Chávez es apoyado por Cuba y él plantea ‘profundizar’ el socialismo y el anti-imperialismo. Mientras que Bush puede negociar con los putinistas él quisiera remover a Chávez, pero debe verse obligado a buscar formas legales para hacer ello y para detener su expansión dentro de su ‘patio trasero’.