El acuerdo se produce después de que el Ministerio de Interior le denegase el asilo político en España, aunque todavía cabe recurso contra esta decisión
La Audiencia Nacional de España acordó este miércoles hacer efectiva la entrega del exmilitar venezolano Hugo Carvajal a EE.UU., que es solicitado por ese país por presunto tráfico de drogas.
Según esta decisión, y tras la solicitud de asilo de Carvajal, que fue denegada por el Ministerio de Interior, queda a disposición de la Unidad de Cooperación Policial Internacional la entrega. Sin embargo, el exmilitar venezolano aún puede recurrir ante la Sala de lo Contencioso administrativo de la Audiencia Nacional e interponer un recurso.
El pasado 9 de septiembre, la Policía Nacional de España capturó a Carvajal, que se encontraba prófugo de la justicia y que era solicitado para su extradición por el Departamento de Justicia de EE.UU.
La detención de Carvajal
Carvajal fue detenido por primera vez en España en abril de 2019, pero luego fue puesto en libertad en septiembre del mismo año, cuando la Justicia española determinó que los cargos en su contra eran demasiado vagos y la solicitud de extradición de EE.UU. tenía motivación política.
Más tarde, en noviembre del 2019, la Audiencia Nacional de España acordó extraditar a Carvajal a EE.UU. y, en marzo de 2020, el Gobierno de España aprobó el proceso. Sin embargo, el exmilitar se mantuvo prófugo de la Justicia y en la clandestinidad.
EE.UU. había prometido una recompensa de 10 millones por la captura del exmilitar, señalado en casos abiertos en Nueva York y Florida, uno por presunto tráfico de cocaína a territorio estadounidense en el 2008 y el otro por supuestos vínculos con las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), hecho por el que también fue sancionado por el Departamento del Tesoro.
Carvajal fue director de la Inteligencia Militar de Venezuela por más de siete años, durante el Gobierno de Hugo Chávez y, brevemente, con el presidente Nicolás Maduro.
También es buscado por Venezuela
Carvajal lleva siete años huyendo de la Justicia estadounidense. En 2014 fue capturado en Aruba por las autoridades locales en una acción conjunta con la DEA, a petición de EE.UU. No obstante, fue deportado y entregado a Venezuela.
En 2017, Carvajal ofreció su colaboración a EE.UU., con la condición de que anularan la orden de captura internacional emitida en su contra, misma por la que fue detenido en Aruba.
Por otra parte, Caracas lo acusa de traición a la patria por conspirar contra el orden constitucional y democrático, ya que en febrero de 2019 alentó —en un video— a ejecutar un golpe armado contra el Gobierno venezolano, mientras reconocía como “presidente encargado” al autoproclamado Juan Guaidó.
En mayo de este año, desde la clandestinidad, Carvajal emitió un comunicado en el que confesó sus intenciones de presionar al Gobierno venezolano y se quejó de los “atropellos” que habría sufrido en España.
“Mi intención de ir a España era poder compartirles información que permitiera ejercer presión al régimen de Maduro desde Europa. Pero luego de los atropellos judiciales que me sometieron y el rumbo que tomó la política de ese país, entendí que me había equivocado de destino”, dijo.
Ahora, si resulta extraditado a EE.UU., podría enfrentar una sentencia de cadena perpetua.
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