Existen muchas inquietudes para que el Comité Técnico de Seguridad Alimentaria y Nacional, COTESAN, elabore las estrategias de seguridad alimentaria, dijo para los lectores de La Jornada, Maren Egedorf. Ella es representante en Nicaragua, Centroamérica, del Sistema Mesoamericano de Alerta Temprana para Seguridad Alimentaria, MFEWS.

Recientemente se reunieron en la capital nicaragüense varios organismos de la sociedad civil, no gubernamentales, sectores estatales y privados, en el Primer Foro Anual sobre condiciones actuales y enfoques estratégicos de seguridad alimentaria. “Surgieron varias inquietudes y se adoptaron las más exitosas”, dijo Maren.

“Es necesario que el Comité Nacional de Seguridad Alimentaria, CONASAN, retome el tema y para eso se necesita una actualización de la ley creada por decreto ejecutivo en el año 2001, sostuvo. Los participantes dejaron claro que CONASAN debe de ser la que impulse las estrategias de seguridad alimentaria, expresó.

Maren Egedorf de MFEWS manifestó que también se plantearon varias inquietudes entre las cuales esta la coordinación de los diferentes sectores como los organismos no gubernamentales, gobierno y otros de la sociedad civil junto con la cooperación internacional para que haya un consenso y coordinación de acciones sobre seguridad alimentaria.

También se acordó hacer un análisis a profundidad ya que Nicaragua es el país que más ayuda ha recibido de la cooperación internacional. Esto implica hacer un análisis del porqué no se ha logrado toda esa inversión para el mejor nivel de vida de la gente, dijo Egedorf.

Otro enfoque fue de que en América Latina y el Caribe los conceptos y los parámetros sobre mal nutrición y pobreza son distintos. No se puede comparar en el análisis lo que es la pobreza y la seguridad alimentaria estratégica que a veces esta dirigida confusamente a querer invertir conceptos y acciones sobre seguridad alimentaria con el combate a la pobreza, enfatizaron los participantes del primer Foro anual sobre condiciones actuales y enfoques estratégicos de seguridad alimentaria, dijo Egedorf.

Maren dijo que se localizó un hecho importante y es que hay un millón de niños sin educación formal e informal en el campo de Nicaragua. Los hábitos de higiene son muy escasos porque de nada sirve que la población solucione su seguridad alimenticia si consume agua contaminada y, por lo tanto, se expresa en la desnutrición parasitaria por la falta de higiene. Expresó la funcionaria de MFEWS que hay inquietudes para que sea introducido el sistema de planificación familiar y contar con un sistema de información sobre cómo están en los territorios. Los participantes hicieron un llamado para que los que toman decisiones sobre seguridad alimentaria puedan sensibilizarse, expresó finalmente Maren Egedorf a los lectores de La Jornada.